El paro efectivo crece hasta los 3,44 millones con 700.000 fijos discontinuos en inactividad
Los expertos llaman la atención sobre el intenso crecimiento del número de demandantes de empleo en enero
El mes de enero cerró con 60.404 nuevos desempleados, elevando la cifra total de desempleados un 2,2 % en términos intermensuales, hasta los 2,77 millones. El paro efectivo, el indicador que mide además a los demandantes de empleo con relación laboral, fue sin embargo muy superior: 3,44 millones.
Este indicador tiene en consideración a los fijos discontinuos en situación de inactividad. Un indicador que el Ejecutivo sigue sin facilitar pese a que Yolanda Díaz prometió a hacerlo hace más de un año. Según Randstad Research la brecha respecto al paro registrado asciende a 734.692 personas, entre las cuales también se contabilizan, por ejemplo, a los trabajadores en situación de ERTE.
Datos del Ministerio
El paro sube en 60.404 personas en un enero en el que se destruyeron 231.250 empleos
«El paro efectivo es, en estos momentos, mayor de lo que era hace un año», subrayan desde Randstad Research. Desde el servicio de estudios llaman también la atención sobre el incremento «muy intenso» del número de demandantes de empleo en enero, con 123.177 personas, un 2,79 por ciento más. Todo ello mientras la afiliación a la seguridad social disminuyó en 231.250 personas en el segundo peor enero desde 2013, a excepción de 2020.
«El Gobierno no nos comunica los fijos discontinuos. Es maquillaje», criticó este viernes el vicesecretario económico del PP, Juan Bravo. «Y a pesar de ese maquillaje somos los peores en Europa en paro general, femenino y juvenil, y más de 2900 empresas han cerrado o se han marchado».
«Estabilización»
Preguntado por los fijos discontinuos, el secretario de Estado de Seguridad Social, Borja Suárez Corujo, afirmó que se ha producido una «estabilización» en el número de contratos dentro de esta modalidad que «no responde al trasvase de temporales a fijos discontinuos, que se produjo tras la aprobación de la reforma laboral», sino que responde «a la propia marcha de la actividad y necesidades de la economía».
El mes pasado se contabilizaron un total de 805.000 afiliados con contrato fijo discontinuo, 13.000 más que en el mismo mes del año anterior. El secretario de Estado de Empleo, Joaquín Pérez-Rey, precisó que suponen en torno al 3,6 % del mercado laboral, pero evitó precisar cuántos de ellos están inactivos, justificando que «no computan» en la estadística de desempleados.
Los contratos fijos discontinuos representan el 6,4 % del total de indefinidos (3,6 % en enero de 2019), mientras que los indefinidos a tiempo completo sitúan su peso en el 74,6 % (74,4 % hace un año) y los indefinidos a tiempo parcial en el 19,1 % (idéntico porcentaje que en enero de 2023), según Nuria Bustamante, economista de CaixaBank Research.
Los contratos fijos discontinuos son «muy flexibles y muy precarios», según Fedea
Una de las grandes novedades de la reforma laboral de 2021 fue el impulso de los contratos fijos discontinuos para compensar la penalización a la contratación temporal. Dicha modalidad «ahora se pueden utilizar en un rango muy diverso de situaciones», según la Fundación de Estudios de Economía Aplicados (Fedea), que resalta que se trata de un modelo de contrato «muy flexible y precario». Dicho tipo de contrato no ofrece, abunda Fedea, «el mismo nivel de seguridad laboral a los trabajadores que los contratos indefinidos tradicionales a pesar de ser etiquetados como indefinidos».