Las raquíticas cifras de inversión amenazan con lastrar el crecimiento del PIB en 2024
Esade reclama reformas más ambiciosas que las contempladas en el Plan de Recuperación
Los expertos ven en las raquíticas cifras de inversión un claro farolillo rojo para la economía española en 2024. Los últimos en ponerlo en relieve han sido los expertos de Esade, que califican de «deficiente» tanto la inversión privada como la pública.
«Todos los indicadores muestran a España por encima de los países del entorno pero quedan algunos farolillos rojos, como la falta de reformas y de inversión», aseguró Toni Roldán, director del Centro de Políticas Económicas de Esade, tras la presentación de su último Informe económico y financiero. «La insuficiente inversión empresarial, agravada por la deficiente inversión pública, condiciona la competitividad y el crecimiento potencial de España», inciden desde Esade.
Según la institución, la «preocupante» evolución de la inversión, tanto pública como privada, y la incertidumbre en torno a las exportaciones debilitarán el ritmo de crecimiento de la economía española, que aún así se situará entre el 1,7 % y el 1,8 %, por encima de la media europea pero por debajo del 2,5 % alcanzado en 2023.
«El sector público y su consumo son los que han tenido la explicación de buena parte del crecimiento del último cuatrimestre», aseguraba recientemente Antonio Pedraza, presidente de la Comisión Financiera del Consejo General de Economistas, sobre los datos del año pasado.
La formación bruta de capital fijo, indicadora de la inversión, apenas creció un 1,6 % en 2023, cuando el Banco de España calculaba que lo haría un 3,1 %. Además, en los nueve primeros meses de 2023 la inversión extranjera no ETVE se situó en 18.303 millones de euros, un 23,3 % menos. El presidente de CEOE, Antonio Garamendi, ha avanzado que retrocedieron un 25 % en el conjunto del año pasado. El propio Garamendi vinculó la evolución del «termómetro» de la salud económica del país con la falta de «estabilidad» y de «confianza» de empresas e inversores.
Inversiones complementarias
Los investigadores de Esade señalan además que en otros países europeos «no se ha observado un comportamiento tan débil de la inversión» como el nuestro. Algo que, a su juicio, «plantea la posibilidad de que, o bien han incidido más profundamente en nuestro país, o bien existen otras razones idiosincrásicas que complementan o refuerzan a las anteriores».
«La inversión privada está muy complementada por la pública. Estamos en un momento en el que no sabemos muy bien cuál va a ser la ejecución de la inversión publica. Es posible que se hayan parado proyectos», destacó Manuel Hidalgo, profesor de Economía de la Universidad Pablo de Olavide, durante la presentación del informe. «La incertidumbre política también podría estar afectando. En mi opinión esto tiene un papel relevante pero no a corto plazo, sino en el largo plazo», aseguró.
Una de las explicaciones puestas sobre la mesa es el retraso en el despliegue de los fondos europeos, lo que a su vez podría estar retrasando la inversión privada. A 31 de diciembre de 2023, tan solo el 46 % de los 76.000 millones en ayudas habían llegado a sus destinatarios. A esta cantidad se suman los 93.500 millones de euros adicionales desbloqueados recientemente en la Adenda, según un reciente informe de LLYC.
Además, en cuanto al sector inmobiliario, la evolución de los tipos ha influido claramente en la disponibilidad de nuevas hipotecas, anticipando una contracción o, cuando menos, un menor crecimiento en el sector en 2024 y, con ello, en la inversión residencial.