Los sindicatos ultiman nuevas huelgas por la cesión de Cercanías a Cataluña ante los incumplimientos de Puente

Los sindicatos ferroviarios amenazan con retomar el calendario de paros por la cesión de Cercanías a Cataluña. Los comités generales de empresa de Adif, (CC.OO., UGT, CGT, SCF y SF) y de Renfe (SEMAF, CC.OO., UGT, CGT y SF) han convocado la Comisión de Conflictos Laborales del Grupo Renfe, un paso previo necesario para la reactivación de la huelga, según recoge el convenio colectivo de la empresa pública.

Las centrales y el ministerio acordaron en noviembre que Renfe y Adif mantendrán su integridad, y sus plantillas seguirán prestando el servicio ferroviario en Cataluña. Sin embargo, los sindicatos consideran que la comisión política establecida en febrero con la Generalitat para el traspaso supone «un claro incumplimiento» del acuerdo por el que accedieron a desconvocar entonces los paros.

Óscar Puente y los representantes de Renfe y Adif pactaron con los comités de empresa la garantía de integridad de las dos empresas, manteniendo sus plantillas y operación, así como la participación de los sindicatos en las mesas de negociación específicas que se originen al efecto de tratar la problemática de las transferencias a la Generalitat.

La comisión política creada para abordar la transferencia deja fuera a los representantes sindicales

Sin embargo, la comisión política finalmente creada deja fuera a la representación sindical, al incorporar únicamente a altos cargos de Transportes, Adif, Renfe y los ministerios de Transición Ecológica, Hacienda y Política Territorial, por la parte estatal, y de la Generalitat, por el lado catalán.

«No se está cumpliendo el acuerdo de desconvocatoria de huelga casi en su totalidad por las continuas declaraciones del ministro afirmando que la transferencia de Rodalies continúa a buen ritmo», detallan a El Debate desde el Sector Federal Ferroviario de CGT.

«La única mención a la representación de las personas trabajadoras en la constitución de esas mesas era solo en una y con un carácter meramente informativo. Lo cual, para nosotros, está muy alejado de lo que se garantizó, la integridad del Grupo Renfe», detallan desde el sindicato. Un contexto en el que, afirman, lo más previsible es que se vuelvan a plantear jornadas de huelga.

Promesa de no segregación

Como ya contó El Debate, los sindicatos pactaron con Transportes no llevar a cabo su huelga tras pactar con Transportes que «ya no se puede producir la segregación de una parte de Renfe Viajeros y de Adif hacia la empresa que pretenden constituir de 'Rodalies de Catalunya'».

Tareas como la conducción de los trenes y el mantenimiento de los vehículos o de la infraestructura seguirían, a juicio de los sindicatos, dependiendo en el futuro del Grupo Renfe. También la regulación del tráfico, la intervención o la venta de billetes, aseguraron entonces los sindicatos.

Todo ello, sin embargo, choca con el punto 2 del acuerdo de PSOE y ERC, que compromete al Ejecutivo a «culminar y ampliar el traspaso integral de la Administración General del Estado a la Generalitat de Catalunya, a lo largo de la presente legislatura, del servicio de transporte ferroviario de Rodalies a Catalunya».

En las últimas semanas el Gobierno ha continuado con sus cesiones ferroviarias, alimentando los temores de los sindicatos de que el proceso acabe derivando en el final de las actuales Renfe y Adif a cambio del nacimiento de «mini Renfes» autonómicas, con unas condiciones laborales más inciertas.

En febrero, los Gobiernos central y vasco confirmaron la cesión de los Cercanías de Vizcaya y Guipúzcoa, que posteriormente se podrá ampliar a otros nuevos servicios en Bilbao y Vitoria. A diferencia de la transferencia a Cataluña. que prevé el personal y la infraestructura, la comunidad autónoma vasca asumirá, por el momento, funciones de regulación, planificación, gestión, coordinación e inspección de los servicios, así como la potestad tarifaria, los horarios y las frecuencias de los trenes. El plan incorpora además la puesta en marcha de 100 inversiones en infraestructuras de Adif por un importe de 400 millones de euros.