La inflación en el primer trimestre es un 18 % mayor que en 2023
La situación es de preocupación porque este año la tendencia mensual es de crecimiento desbocado y apoyada por el Gobierno
Acabo de revisar las 20 últimas notas de prensa de la factoría de manipulación de la Moncloa y no he encontrado ni una hablando de la inflación que tenemos en España. En cambio recuerdo perfectamente el post y el vídeo que lanzó Carlos Cuerpo, ministro de Economía, en LinkedIn para comentar la magnífica actuación del Gobierno en el control de los precios.
Por cierto, parece que el ministro no tiene mucho predicamento en LinkedIn, porque a su post le dieron 38 me gusta, tuvo 3 comentarios y fue compartido una vez. Para que se hagan una idea, el último post de Marc Vidal tuvo 2.218 me gusta,175 comentarios y fue compartido 101 veces. O, por ejemplo, uno publicado el día 28, por el que escribe este artículo, sobre las reacciones que me suscita el Fiscal General del Estado, en 7 horas tuvo 123 me gusta, 25 comentarios y ha sido compartido 25 veces.
Está bien que el ministro haga uso de esta herramienta, que es la más usada en el mundo de los negocios. Es bueno. Lo malo es que le queda todavía mucho pico y pala para ganarse el respeto de la red, y no lo va a conseguir tergiversando la verdad.
Está claro que la factoría de desinformación cuando la noticia no le viene bien la oculta, se la calla y, a ser posible, que pase desapercibida. Como ha pasado, sin pena ni gloria el desastre de marzo, donde el mes ha sido terrible con una subida de precios del 0,8 %, que ha crecido en 3 décimas más que la subyacente, llegando el IPC a una tasa anual del 3,2 %, de la subyacente al 3,3 % y del IPC Armonizado que se envía a Eurostat, que también se queda en un 3,2 %.
Claro que la publicación el día 27 de marzo, miércoles, en pleno inicio de las vacaciones de Semana Santa, ha pasado casi desapercibida por la mayoría de los medios de comunicación y les ha permitido no tenerse que poner colorados por algo que se venía venir.
Pero lo que precisamente en este artículo quería hacer, es demostrar que los números son realmente preocupantes si los miramos con malos ojos, como lo tenemos que hacer los que sabemos que la Moncloa va a distorsionar cualquier cosa que suceda.
Miren ustedes esta tabla que acabo de preparar con la información que proporciona el INE:
Fíjense ustedes en que en los 3 primeros meses la inflación, en 2 de ellos, está por encima del 2023.
En 2023, la inflación en el primer trimestre fue del 1,1 %, mientras que en 2024 ha sido del 1,3 %, con un enero de 0,3 puntos por encima, con un febrero superior a enero en 0,3 puntos, pero 0,5 puntos por debajo del 2023 y en un marzo que se ha ido al doble del año pasado con un 0,8 % y otra vez muy superior al mes de febrero de 2024.
La situación es de preocupación. El año pasado pasábamos un enero en negativo con bajadas reales de precios, posiblemente por el efecto rebajas y que el consumo estaba tirando, pero con una subida de disparate en febrero y reajuste de la subida en marzo, para llegar a ese 1,1 %, que daba una tendencia de que íbamos a llegar al 4,4 %, aunque nos quedamos en diciembre en un 3,1 %, por lo efectos de las medidas que el BCE tomó y que llevó los tipos de interés al 4,5 %.
Digo que la situación es de preocupación porque este año la tendencia mensual es de crecimiento desbocado y apoyada por el Gobierno. La subida del IVA de la factura energética primero al 10 % en enero y segundo al 21 % en marzo, va a darle duro al subíndice de precios energéticos, que va a provocar tensiones inflacionistas. Si a esto le añadimos la crisis del Mar Rojo, que está encareciendo todo, incluso el precio del barril Brent, que está en 87 dólares y si además le sumamos, la inflación que produce inyectar 29.000 millones en los dos primeros meses más de deuda, el Gobierno está provocando la tormenta perfecta.
Pero, sobre todo, es de preocupación porque mirado 2024 sobre 2023 en el primer trimestre el Índice de Precios ha subido un 18,2 %. Y esto es lo que dicen las matemáticas, aunque en la Moncloa y en Economía duela y moleste.
Pero, sobre todo, es de preocupación porque mirado 2024 sobre 2023 en el primer trimestre el Índice de Precios ha subido un 18,2%. Y esto es lo que dicen las matemáticas, aunque en la Moncloa y en Economía duela y moleste.
La necesidad de recaudar a costa de lo que sea, la necesidad de pagar lo que se debe de meses anteriores y el mantenimiento del conflicto del Mar Rojo en el que hemos decidido no participar, está en su conjunto dando alas a la inflación.
A esta tormenta, solo le falta que Alemania presente unos buenos resultados de inflación y en mayo el BCE anuncie una primera bajada de tipos, que hoy no vemos, pero que sería muy beneficiosa para la economía, pero muy perjudicial para la inflación.
Por desgracia en España, cada vez estamos divergiendo más de la Unión Europea.