Moncloa ultima una catarata de nombramientos en empresas, Banco de España y puestos clave en pleno rally electoral
El Gobierno deberá dotar de altos cargos a numerosos organismos de nueva creación y buscar remplazo a Pablo Hernández de Cos
El Gobierno tiene entre sus manos el nombramiento o la renovación de un importante número de puestos clave en los próximos meses. Entre ellos, la cúpula de la renacida Comisión Nacional de la Energía, que se desgajará de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMV). También el sustituto del gobernador Pablo Hernández de Cos en el Banco de España o el consejero con el que culminará su desembarco en Telefónica. La gran mayoría, a cerrar en los próximos meses, en los que se sucederán las elecciones. Primero, en País Vasco, el 21 de abril, luego en Cataluña, el 12 de mayo y finalmente, el 9 de junio, las europeas.
En apenas cuatro meses de legislatura el Ejecutivo ha acelerado además la colocación de afines al PSOE. Con la elección de la socialista Concepción Cascajosa como presidenta de RTVE, esta semana, el Gobierno ronda la decena de nombramientos de altos cargos en empresas públicas y las compañías participadas por la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) procedentes de la órbita socialista. Incluyendo la elección de un senador del PSOE para sustituir a un ingeniero en la minera Hunosa, la elección del ex secretario de Estado de Comunicación Miguel Ángel Oliver como presidente de Efe y el traslado de Juan Manuel Serrano, ex jefe de Gabinete de Pedro Sánchez, de Correos a la sociedad que gestiona las radiales rescatadas, Seitt.
Telefónica
Tras tres meses de secretismo el Ejecutivo ha puesto la velocidad de crucero para entrar en Telefónica. Ha comprado ya, con fondos de Hacienda, el 3 % del capital a través de la SEPI, y posee otro 2 % a través de derivados financieros, según adelantó Ep. Equipara así su peso al de accionistas como Caixabank o BBVA, que cuentan cada una con un consejero.
Ahora bien, debería convocar para ello una junta extraordinaria, dado que el orden del día para la próxima junta de accionistas del 12 de abril ya está cerrado y no puede modificarse. En este escenario, no ha pasado desapercibido el reciente movimiento del Consejo de Ministros autorizando al personal directivo de la SEPI para poder ejercer la presidencia y participar en más de dos consejos de administración.
Comisión Nacional de la Energía
Otro movimiento de calado será la nueva Comisión Nacional de la Energía, el organismo que asumirá las competencias sectoriales de manos de la CNMC en materia de supervisión y control de los mercados eléctrico, de hidrocarburos líquidos, de gas natural, de hidrógeno verde y otros gases renovables. Al frente se situará un presidente con rango de Secretario de Estado, un vicepresidente y cinco consejeros. El nuevo organismo, que asumirá también parte del personal y edificios de la CNMC, deberá estar plenamente operativo cuatro meses después de su aprobación legislativa.
El presidente de la CNE tendrá rango de Secretario de Estado y estará al frente de un consejo de cinco miembros más el vicepresidente
Todo ello mientras, como contó El Debate, Pedro Sánchez prepara el salto a Bruselas de su vicepresidenta Teresa Ribera, ministra de Transición Ecológica, con las competencias de Energía. Su marido, Mariano Bacigalupo, es desde 2022 consejero de la CNMV —tras pasar antes por la CNMC—, y el propio Ejecutivo destacó al nombrarlo su experiencia en la extinta Comisión Nacional de la Energía, donde fue vicepresidente del Consejo. También ha sido miembro del Consejo de Reguladores de la Agencia de Cooperación de la Unión Europea (ACER).
No es el único movimiento de calado con intervención del Ejecutivo en el sector eléctrico que se espera en los próximos meses, mientras arrecian los rumores sobre el relevo de la exministra Beatriz Corredor al frente de Redeia, la antigua Red Eléctrica.
Autoridad del Cliente Financiero
La CNE es el organismo más relevante que se creará de forma inminente, pero no el único. El pasado 26 de marzo el Consejo de Ministros aprobó por la vía de urgencia la creación de la Autoridad Independiente de Defensa del Cliente Financiero, bajo el paraguas del ministerio de Economía de Carlos Cuerpo.
El nuevo organismo agrupará los servicios de reclamaciones del Banco de España, la CNMV y la Dirección General de Seguros y Pensiones, además de desplegar nuevas competencias para reforzar el control del Ejecutivo sobre el sector financiero. Estará controlado por un Consejo Rector, un presidente y un vicepresidente, y tendrá un carácter eminentemente técnico, de ahí que el sector financiero confíe en que esté conformado por profesionales desvinculados de la política.
El nuevo organismo agrupará competencias del Banco de España, la CNMV y la Dirección General de Seguros
Cuerpo también tiene que resolver en los próximos meses quién sustituirá a José Carlos García de Quevedo como presidente del Instituto de Crédito Oficial (ICO), que abandonará su cargo en septiembre con rumbo a Bruselas.
CNMV y CNMC
En los próximos meses además el Ejecutivo debe confirmar si prorroga el mandato de Rodrigo Buenaventura al frente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores, cuestionado por el papel del regulador en la crisis de Grifols y el ataque de GIP, el fondo bajista tras Gotham City Research. Buenaventura podría mantenerse al frente del regulador bursátil únicamente otros dos años, después de que la Ley del Mercado de Valores y Servicios de Inversión de 2022 redujera de cuatro a dos años la prórroga, sin posibilidad de permanecer posteriormente en el cargo.
Asimismo está pendiente ocupar la vacante de cinco de los diez consejeros de la CNMC, lo que tradicionalmente se realiza de acuerdo con el principal partido de la oposición. El PP de hecho se quedó sin su último representante en el organismo que preside Cani Fernández tras el cese, el pasado verano, de María Ortiz Aguilar. El roto es de tal calado que el organismo ha puesto en marcha un sistema de rotación entre sus dos salas, Competencia y Supervisión Regulatoria.
Banco de España
Con todo, el nombramiento más relevante será el del sustituto de Pablo Hernández de Cos, cuyo mandato de seis años al frente del Banco de España expira el próximo mes de junio sin posibilidad de renovación. Durante estos años, De Cos no se ha puesto de perfil ante algunas de las medidas aprobadas por el actual Ejecutivo. El requisito para su sucesor es que tenga «reconocida competencia en asuntos monetarios o bancarios».
La elección de la actual vicegobernadora, Margarita Delgado, que se quedó a las puertas de dirigir el supervisor del Banco Central Europeo, el MUS, se entendería como un relevo natural para un cargo para el que también se han barajado nombres como David Vegara, actual consejero del Sabadell, o Montserrat Martínez Parera, la opción de Calviño como vicepresidenta de la CNMV, como adelantó en enero Jordi Benítez en este periódico.
También se ha asociado con José Luis Escrivá, el actual ministro de Función Pública y Transformación Digital. Para entonces, y si se cumple el calendario, acabará de echar a andar su ‘SEPI digital’, la Sociedad Española para la Transformación Tecnológica (SETT) que anunciara a bombo y platillo en el Mobile World Congress (MWC) de Barcelona. Un nuevo organismo que aspira a acabar gestionando la participación del Estado en Telefónica y otras empresas estratégicas, que gestionará en torno a 20.000 millones de euros en inversiones tecnológicas y cuyo organigrama también está pendiente de definir.