El alza del SMI y de las cotizaciones dispara los costes laborales de las pymes durante diez trimestres seguidos
La productividad de las pequeñas y medianas empresas españolas retrocede un 0,7 % y se sitúa en niveles de 2015
Los costes laborales no dan tregua a las pequeñas y medianas empresas españolas. El indicador encadena diez trimestres consecutivos de fuertes alzas, superiores al 5 %, según el indicador que trimestralmente elabora la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme). Se trata de algo que no sucedía desde 1994 y que va a más, dado que en el cuarto trimestre de 2023, último con datos disponibles, el aumento alcanzó el 5,3 %, el más alto desde mediados de 2022.
La patronal de las pymes apunta a las sucesivas alzas de cotizaciones sociales y del SMI que se han registrado en los últimos años como principales causantes. Según sus datos, la remuneración media ordinaria de los trabajadores se disparó un 5 % en el último trimestre del año pasado, mientras que la remuneración por cotizaciones y horas extra lo hizo un 5,9 %. La situación está afectando ligeramente más a las empresas pequeñas que a las medianas, con un crecimiento medio del coste laboral del 11 y el 10 % respectivamente en los últimos dos años.
En los últimos cinco años el Ejecutivo ha subido el SMI un 54 %, hasta los 1.134 euros al mes, uno de los mayores incrementos de la UE en este período. Un reciente informe del Instituto Juan de Mariana cifraba en que este incremento ha impedido la creación de 210.000 empleos en las ocupaciones con menor productividad y baja cualificación.
Situación de «debilitamiento»
A pesar de que la actividad de las pymes no ha parado de crecer, en su último barómetro, publicado este lunes, Cepyme constata un «debilitamiento» en general de su situación. La patronal ve especialmente preocupante la situación de la productividad, entendida como el volumen medio de ventas por empleado, que retrocedió un 0,7 % en 2023 y se situó por debajo de los niveles alcanzados en 2015.
«El repunte de productividad que se produjo en 2021 tan solo sirvió para compensar el gran desplome registrado en la pandemia», resaltan desde la organización que preside Gerardo Cuerva. «Lamentablemente, una vez estabilizada la actividad, la productividad ha recuperado su tendencia descendente iniciada en 2017», afirman. En el sector preocupa también el empeoramiento de la situación financiera de las pymes, con el coste medio de los créditos superando el 5 % por primera vez desde 2009.