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PODCASTEl Debate de la Economía

Buesa y Pampillón: «El PNV no ha sido capaz de corregir la decadencia económica que empezó en el País Vasco en 1975»

Analizamos el lado económico de las elecciones vascas que se celebran este Domingo y los movimientos accionariales en torno a Naturgy, Telefónica y Talgo

El catedrático de la Universidad CEU San Pablo Rafael Pampillón y el de la Complutense Mikel Buesa analizan en nuestro podcast la vertiente económica de las elecciones vascas de este Domingo y la posible entrada o retorno del Estado a Naturgy, Telefónica y Talgo.

Sobre el primer tema, Buesa es muy claro: «El País Vasco pierde posiciones relativas en el conjunto de España desde el año 1975. Entonces suponía el 7,5 % del PIB y hoy está en torno al 5,6 %. Es algo que no ha ocurrido en Madrid ni en Barcelona hasta que empezó el Procés», indica. La decadencia económica del País Vasco ha sido «consecuencia del nacionalismo terrorista del que es heredero Bildu y del nacionalismo del PNV, que ha sido incapaz de corregir esa trayectoria incluso cuando cesó el terrorismo», añade.

Buesa explica en nuestro podcast cómo el proceso de decadencia ha continuado hasta nuestros días. Afirma que se refleja en «un deterioro muy importante de la sanidad pública» y de la educación, que en este segundo caso se traduce en «niveles muy bajos respecto a otras regiones de España». Como consecuencia, detalla, el 20 % de los jóvenes ha abandonado la región porque no encuentra empleo ni oportunidades, y cada vez hay más mayores en la comunidad. «El País Vasco va a desaparecer. Hay una apariencia de bienestar, pero la corriente de fondo es terrible», concluye.

Rafael Pampillón complementa el análisis de Buesa comentando el índice de actividad del sector industrial y el sector servicios que publicó ayer el Instituto Nacional de Estadística (INE): «El País Vasco sale a la cola de España. Sus ventas industriales han tenido una caída espectacular en el último año». Sobre el éxodo de talento que comenta Mikel Buesa, añade que la necesidad de hablar euskera «desalienta que entren directivos», una situación que puede empeorar si la atmósfera se radicaliza en esta línea: «Cuanto mayor es el grado de nacionalismo, más complicada es la vida: más regulaciones, más requisitos... Desalienta la actividad empresarial. En ese sentido, estamos en un escenario que no atrae ni al talento ni a las empresas, y de ahí la situación económica de deterioro en el País Vasco».