La realidad del informe del FMI: una economía mediocre
El informe del FMI refleja el deterioro estructural de la economía española: una economía que Sánchez ha convertido en mediocre
El Fondo Monetario Internacional (FMI), ha emitido su último informe sobre la economía mundial, desagregando, después, por países. El Gobierno ha corrido a celebrar los datos sobre España contenidos en el informe, pero parece que o se ha quedado en la superficie o, voluntariamente, se autoengaña y trata de contagiarnos de ese autoengaño, porque en el informe del FMI no hay muchos motivos para la alegría, más allá de los efímeros datos de crecimiento de muy corto plazo, pues la estructura económica española se deteriora.
La realidad de lo que subyace en el informe del FMI es la siguiente:
- El FMI, en sus perspectivas de la economía mundial para 2024, recientemente publicado, mejora sus perspectivas sobre la inflación internacional.
- Es cierto que, junto a Estados Unidos, mejora la previsión del crecimiento de España.
- Ahora, en esa mejora en las previsiones de crecimiento no hay base para alegrarse como lo ha hecho el Gobierno:
- Como bien dice el FMI, el crecimiento de la zona euro se ha producido partiendo de niveles muy bajos (es más efecto rebote que otra cosa). De hecho, el crecimiento español es, en gran parte, rebote.
- La mejora del crecimiento español para 2024 se debe al efecto estadístico que provoca la mejora del dato del IVTR-2023, porque como el crecimiento anual se calcula con la media de los crecimientos interanuales de los cuatro trimestres del año, al crecer con fuerza el IVTR-2023, eleva artificialmente, por efecto estadístico, el crecimiento interanual de los tres primeros trimestres de 2024, con lo que simplemente con ello, sin que hubiese crecimiento esos trimestres, crecería casi un punto la economía española (exactamente, ocho décimas).
- Además, sólo mejora el crecimiento de la economía una décima para 2024, dejando igual 2025, pero es que respecto a sus previsiones de octubre empeora 2024 en una décima, mientras que Estados Unidos mejora en comparación con ambas publicaciones anteriores (octubre-23 y enero-24). Es decir, realmente, las previsiones sobre España siguen por debajo de las estimadas en octubre.
- Por otra parte, destaca que la media de la zona euro se ralentiza. Esto puede afectar muy negativamente a la economía española vía sector exterior, ya que al perder renta disponible nuestros principales socios comerciales y mercados emisores de turistas, se reducirá la aportación positiva al crecimiento del sector exterior, minorando nuestro crecimiento.
- También dice el FMI que los bancos centrales deben estar vigilantes ante la inflación, aunque aboga por rebajar tipos, y señala que en cualquier caso, la subida de tipos perjudica a las economías más endeudadas (la española es una de ellas).
- De hecho, la inflación en España se sitúa por encima de las de la zona euro, según las previsiones del FMI, con un 2.7% en 2024 y un 2,4% en 2025, frente al 2,4% y 2,1%, respectivamente, de la zona euro.
- Adicionalmente, mantiene a España como el único país de la zona euro con una tasa de paro de doble dígito en 2024, por encima del 11%.
- Por tanto, esta realidad dista mucho de las alegrías que el Gobierno ha manifestado con este informe: el crecimiento es, básicamente, por efecto estadístico y las previsiones son algo peores que las de octubre de 2023; la inflación se mantiene más alta que en la media de la eurozona; la deuda española es muy alta y puede verse más perjudicada que la media por los tipos altos; y es la única economía de la UE con una tasa de paro de doble dígito.
Ésa es la realidad del informe del FMI, que refleja el deterioro estructural de la economía española: una economía que Sánchez ha convertido en mediocre, que caerá cuando haya que reducir el gasto público, porque se habrá expulsado durante estos años a la inversión productiva.