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Fernando Rayón

El maldito PowerPoint le estalla a Begoña Gómez y a su corte de mecenas

En su última página hace repaso de colaboradores. Y ahí se descubrió el pastel

Begoña Gómez, en el mitin de Benalmádena (Málaga) donde ha reaparecido tras su imputaciónEFE

Siempre pensé que los PowerPoint eran un invento del diablo. Al principio colaba por aquello de utilizar métodos audiovisuales, pero hoy el que lo siga utilizando debería ser fusilado al amanecer. Sobre todo si es de los que te van leyendo cada una de las páginas como si fueras ciego o de otro planeta.

Es lo que le pasó a Begoña Gómez con su PowerPoint, una joya de 18 páginas que, según El Confidencial, estaba fechado en noviembre de 2022. El caso es que la mujer de Pedro Sánchez lo utilizaba para explicar un software, una herramienta informática con la que captaba a las empresas que querían utilizar sus servicios. Este software, según explicaba la propia Begoña, servía para integrar «el impacto social y ecológico a la estrategia del negocio, con el fin de democratizar una ventaja competitiva y económica a la que todos tengan acceso».

Superado el primer impacto de los asistentes, el maldito PowerPoint pasaba a desgranar, página a página, las enormes ventajas de utilizar Transforma TSC, que ese era el nombre de la criatura, para «ayudar a las compañías a identificar los objetivos de desarrollo sostenible que se identifican con el negocio» y «acceso a la cadena de valor de grandes cuentas».

Pero, como ya dije, los PowerPoint los carga el diablo y, en su penúltima página —esa en la que ya los asistentes han sido derrotados por las circunstancias— titulada Colaboradores del proyecto, reconoce que esa herramienta que ofrece a empresas no es suya, sino que ha sido creada por Telefónica, Google y Minsait (la filial de Indra); y que además la ONCE, la Cámara de Comercio de España y la nueva patronal Conpymes (Confederación Nacional de Pymes) colaboran en el lanzamiento del software. Y ahí se descubrió el pastel.

De Telefónica e Indra ya sabíamos que estaban en el ajo, pero es quizá la aparición de Conpymes lo que explica muchas cosas. Primero porque el presidente de esta asociación empresarial, José María Torres, ya había utilizado su empresa, Numintec, para firmar en 2021 un convenio de colaboración con la Cátedra de Transformación Social Competitiva que dirige Begoña Gómez, como publicó El Mundo. Torres había apoquinado 6.000 euros en efectivo que le debieron saber a gloria pues, solo dos meses después, la mujer de Sánchez acudía al acto fundacional de Conpymes, el grupo de pequeñas y medianas empresas que, desde entonces, ha colado el Gobierno en todos los encuentros y pactos laborales. Se trata de la competidora de Cepyme, que esta patronal ha criticado en varias ocasiones por su falta de representatividad.

Pero los males del PowerPoint no estaban solo en conocer a los colaboradores de Begoña, sino que unas simples llamadas a estas empresas aclararon que todas ellas habían desarrollado el software de forma gratuita para aquella cátedra que Begoña dirigía en la Complutense. Una colaboración gratuita con la universidad.

De ahí la sorpresa que se llevaron Agustín Marco y José María Olmo cuando descubrieron que la esposa del presidente del Gobierno había solicitado en 2022 el registro de la herramienta informática ante la Oficina Española de Patentes y Marcas. Ella resulta ser hoy la administradora única de Transforma TSC y de aquel logotipo que se repetía en las 18 páginas del maldito PowerPoint. Y continuará.