A Madrid nos roban
Cataluña da a entender que se le maltrata y no se le da lo que le corresponde,
y esa es una gran mentira
El Gobierno de España ha decidido inventarse frases nuevas para justificar algunas viejas mentiras, que se han ido demostrando a lo largo del tiempo que eran completamente falsas.
Hemos pasado de aquel Madrit nos roba, que se ha ido diluyendo como un azucarillo en agua caliente, a la «mayoría de los catalanes quieren la independencia», que ya ni los independentistas se lo creen, cuando miran los resultados en las urnas, a la última moda, «la financiación singular de Cataluña», que es otro montaje político que no conduce a nada más que un objetivo, que los independentistas tienen muy claro: «LA DESTRUCCIÓN DEL ESTADO ESPAÑOL».
Ya no es tan importante tener la independencia a corto plazo como ir minando la Constitución, para que esta quede en papel mojado, que no sirva para nada, y a partir de aquí convertir a España en una República Confederal al estilo de lo que es hoy la Unión Europea, que no es otra cosa que una confederación de Estados, donde cada uno tiene su propia soberanía, sus propias leyes, sus propios impuestos, y donde hay delegadas en una Comisión Europea que tiene unas funciones importantes, pero limitadas.
Madrid recibe el 14 % de lo que recauda; Cataluña, el 43 %
Solo hay un punto en el que coincido con los independentistas, y es que es necesario cambiar y adaptar el modelo de financiación actual de las comunidades autónomas, pero no en tanto de cuál es el monto del reparto, sino en cómo se reparte.
El monto del reparto se calcula en base a la recaudación del IRPF, del IVA y de los Impuestos Especiales que se generan en el Estado español, menos País Vasco y Navarra, que tienen un reconocimiento propio en la Constitución y que en el caso de Cataluña se le ofreció en 1980, cuando se estaba discutiendo la Ley Orgánica de Financiación de las Comunidades Autónomas (LOFCA). Pujol consideró que, en ese momento, la prioridad era consolidar la autonomía catalana, y que insistir en un régimen fiscal especial podría haber complicado las relaciones con el gobierno central y con otras comunidades autónomas.
Este monto es la suma del 45 % de la recaudación del IRPF, el 50 % de la recaudación del IVA y el 58 % de la recaudación de los Impuestos Especiales, además de los impuestos cedidos a cada comunidad como los de Patrimonio, Sucesiones y Donaciones y Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos documentados.
Lo que Cataluña da a entender es que se le maltrata y no se le da lo que le corresponde. Esa es posiblemente una de las grandes mentiras, que, por tan repetidas, hasta los propios políticos catalanes se la han llegado a creer.
Hoy quiero mostrar que es completamente falso lo que no paran de repetir. Lo voy a hacer con los datos del 2023 de recaudación de tres comunidades (Madrid, Cataluña y Andalucía): lo que les correspondería si se llevasen la parte pactada y lo que realmente se les traspasa, y verán ustedes que a Cataluña se le da más dinero del que le corresponde.
Los datos, como siempre, son oficiales. La recaudación es la que publica la Agencia Tributaria y lo traspasado es lo que publica el Ministerio de Hacienda:
Veamos caso por caso. La Comunidad de Madrid, en 2023, recaudó 120.576 millones. Por IRPF hizo ingresar en las arcas de la Agencia Tributaria 46.581 millones, de los que le corresponderían 20.962 millones; por IVA recaudó 40.694 millones, y le corresponderían 20.347 millones, y por Impuestos Especiales, recaudó 17.508 millones, de los que le corresponderían 10.155 millones. A Madrid, por su recaudación, se le deberían traspasar 51.463 millones, pero en cambio solo recibieron 17.232 millones. Por lo tanto, tienen un saldo negativo de 34.231 millones que sirven para ayudar a otras regiones y, como veremos, entre ellas Cataluña. En definitiva, Madrid está recibiendo el 14 % de lo que recauda.
A Andalucía se le transfiere el 122 % de lo que recauda
Si hacemos el mismo cálculo para Andalucía, a esta le corresponderían por todos los conceptos 7.245 millones, y en cambio reciben 23.021 millones, con un saldo positivo de 15.766 millones. Por lo tanto, se le transfiere el 122 % de lo que recauda.
Y vayamos al caso singular de Cataluña, que debería recibir en total 20.780 millones, de los cuales 10.444 vendrían del IRPF, 9.286 del IVA y 1.051 de los Impuestos Especiales, y que recibió 23.255 millones; es decir: 2.475 millones más de lo que le correspondería, y se lleva el 43 % de todo lo que recauda; es decir: 3 veces más en porcentaje de lo que se lleva Madrid.
El auténtico caso singular es el de Madrid, que es lo mismo que en la sangre el grupo 0 con factor Rh negativo, que es dador universal.
Cataluña quiere que le den el 100 %. Si se hace y lo consiguen, será el fin del modelo actual de la autonomías y la muerte fulminante de la Constitución del 78.
Y si es así, quizás ha llegado el momento que Madrid se declare Reino Independiente, empiece a negociar con todas las empresas catalanas su traslado a Madrid con beneficios fiscales especiales y dejar Cataluña como un solar y con el 50 % de la población del Islam, y en donde, en 20 años más, el catalán será una lengua muerta y donde la población hablará en árabe y habrá que volver al año 711 y empezar La Reconquista de nuevo.