Baleares, Canarias y Madrid tirarán del crecimiento en 2024 con el turismo como gran motor de la economía
Todas las autonomías se sitúan ya por encima del nivel de PIB que registraban antes de la pandemia
La economía española crecerá este año un 2,4 %, según la previsión actualizada del Ejecutivo, que coincide con la de Funcas. La fundación de las antiguas cajas de ahorro considera que, entre los grandes impulsores, estará el turismo, lo que que explica que Baleares y Canarias vayan a ser las regiones que más crezcan, registrando alzas del 3,5 y el 3,2 %, respectivamente.
Solo estas dos autonomías, junto con Madrid, que crecerá un 2,6 %, verán incrementarse su PIB por encima de la media nacional. Por el contrario, Asturias y La Rioja registrarán el menor crecimiento del PIB, ambas con un 1,9 %.
A diferencia de ejercicios anteriores, donde el consumo público tuvo un papel protagonista, la prórroga presupuestaria y la llegada de las nuevas reglas de gasto europeas harán que este componente pierda peso. En lugar de ello, junto al turismo destacará también la mejora consumo privado ─gracias a la mejora de la renta disponible de los hogares y al recurso al ahorro embalsado─ y la inversión en infraestructuras, impulsada por los fondos europeos. La industria automovilística, con grandes centros en Aragón, Cataluña, País Vasco y Comunidad Valenciana, es otro sector con perspectivas favorables.
En cuanto al sector exterior, su papel seguirá siendo destacado pese a la atonía de la economía europea, principal mercado para las exportaciones de bienes. Las exportaciones de servicios no turísticos también tendrán un mejor desempeño.
«Las exportaciones de servicios no turísticos van a alcanzar los 100.000 millones, y estarán por encima de los servicios turísticos, que rondaran los 90.000», avanzó el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, en el Consejo de Ministros en el que se presentó el cuadro macroeconómico. «Son exportaciones informáticas o financieras. Ello da idea de la modernización de nuestro sector económico», afirmó.
Todas las autonomías se sitúan ya por encima del nivel de PIB que registraban antes de la pandemia. Ahora bien, existen grandes diferencias entre Madrid, cuyo PIB es un 7,5 % superior al de 2019, o Valencia, que ha crecido un 6,2 %; y Extremadura o Asturias, cuya economía apenas ha crecido un 0,5 % y un 1,6 % en los últimos cinco años.
Pese a ello, Funcas detecta que se está produciendo una cierta convergencia entre comunidades autónomas, debida a la incorporación de fuerza laboral inmigrante «y no por un aumento de la productividad en las regiones más rezagadas», destaca Raymond Torres, director de Coyuntura. En los dos últimos años, subraya, esta aportación ha tenido un impacto notable en la población activa, empujando hacia abajo la tasa de paro que, pese a todo, se mantiene en cotas muy elevadas, duplicando la media europea.
El paro, añade Funcas, ha tendido a reducirse de manera más acusada en las comunidades con más desempleo, como Andalucía, Canarias, Castilla-La Mancha y Extremadura. La previsión para 2024 es que baje del 10 % en diez autonomías: Aragón, País Vasco, Cantabria, La Rioja, Baleares, Cataluña, Galicia, Castilla y León, Madrid y Navarra. «Con todo, el desempleo estructural sigue siendo uno de los principales desequilibrios en la mayoría de los territorios», subraya Funcas, que destaca que ni una sola de las comunidades autónomas españolas logrará situarse al nivel de paro que se espera en Europa, el 6,5 %.