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La ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma SaizEuropa Press

El Gobierno buscará fórmulas para poner coto al alza del absentismo laboral tras el verano

Seguridad Social se compromete con la patronal y los sindicatos a activar una mesa para realizar un seguimiento exhaustivo tras haberse disparado desde la pandemia

El absentismo laboral se ha disparado en los últimos cinco años. Las horas no trabajadas por incapacidad temporal han crecido, nada más y nada menos, que un 48,3 %, desde el cuarto trimestre de 2019. Es casi cinco veces más de lo que lo han hecho las horas cotizadas totales, según refleja el informe sobre 'La disparidad entre los ocupados y las horas trabajadas en España', elaborado por CaixaBank Research.

Este es un problema que preocupa a la patronal y a los sindicatos. Por eso, según fuentes del Ministerio de Seguridad Social, a partir de septiembre, constituirán una mesa con los agentes sociales para realizar un seguimiento exhaustivo de lo que está sucediendo y así poder plantear las reformas necesarias para poner coto al alza del absentismo laboral.

Este es uno de los puntos incluidos en el acuerdo, alcanzado este miércoles, en materia de pensiones y de seguridad social, en él que se les da un mayor protagonismo a las Mutuas colaboradoras con la Seguridad Social. Aunque solo los médicos de los Servicios Públicos de Salud serán los que pueden dar el alta o la baja a un paciente, las mutuas se encargarán de realizar las pruebas diagnósticas o los tratamientos rehabilitadores que consideren oportunos, siempre que se trate de una dolencia de origen traumatológico incluida en un listado cerrado, y con previa solicitud del Servicio Público. Con este convenio se pretende acelerar los procesos de recuperación de los pacientes.

Se pierden 13 días al año

El porcentaje de jornadas perdidas ha pasado del 4,1 % en 2018 al 5,9 % en 2023. Esto es un aumento del 43 % de acuerdo con el tercer informe del estudio sobre la incapacidad temporal elaborado por Umivale Activa y el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (Ivie).

Si lo analizamos por horas, teniendo en cuenta que una jornada completa anual se sitúa entre las 1.750 y las 1.800 horas –aunque el máximo permitido por el Estatuto de los Trabajadores son 1.826 horas y 27 minutos–, este incremento supone que cada trabajador pierde unos 13 días al año por bajas médicas.

Canarias, País Vasco, Galicia, Cantabria, Asturias, Cataluña y Murcia cuentan con las mayores tasas de absentismo. A nivel provincial, el mayor porcentaje se observa en Vizcaya (8,5 %), frente a Salamanca, que tiene el nivel más bajo (4,4 %).

Además, aunque las diferencias entre los distintos sectores son muy amplias, todas las ramas de actividad recogen importantes incrementos en ese periodo. Las mayores diferencias se encuentran en la agricultura (+53,8 %), actividades de organismos extraterritoriales (+53,7 %), comercio y reparaciones (+53,7 %), y transporte y almacenamiento (+50,9 %); mientras que el menor aumento se observa en Información y comunicaciones, donde la subida ya es bastante significativa (18,7 %). Respecto a las jornadas perdidas, las tasas más altas se dan en las actividades administrativas (9,2 %), agua y saneamiento (8,5 %) y actividades sanitarias (7,7 %).

Costes directos e indirectos

Esto acarrea un coste total de 25.326 millones a la Seguridad Social, según la Asociación de Mutuas de Accidentes de Trabajo (AMAT). Pero es que las empresas se llevan la peor parte, porque, tal y como cifra otro estudio elaborado por Cepyme, el absentismo les cuesta 135.000 millones al año.

Los expertos consultados por El Debate explican que a estas cifras se le suman los costes indirectos, como puede ser la incorporación de trabajadores que conocen menos el puesto de trabajo, provocando, así, una merma de la productividad. Y en ocasiones, para que esto no ocurra, el resto de los trabajadores tienen que soportar un aumento de las horas trabajadas para compensar las bajas médicas. Además, aunque sean sustituidas por otros trabajadores supone un coste adicional, porque del 3 al día 17 de baja la empresa tiene que pagar un salario, así como su cotización.