Vox propone eximir de IRPF los primeros 6.000 euros de rendimientos del ahorro
Buscan compensar la pérdida de poder adquisitivo que han sufrido las familias españolas por las «nefastas políticas en materia económica y tributarias llevadas a cabo por el Gobierno»
Vox ha registrado una iniciativa en el Congreso con la que propone promover los cambios normativos oportunos para eximir de IRPF los primeros 6.000 euros de rendimientos generados por el ahorro.
Se trata de una proposición no de ley que se debatirá en la Comisión de Hacienda y Función Pública y que, según explican, tiene por objeto «proteger el ahorro de las clases medias y populares».
A la hora de declarar las rentas generadas por el ahorro durante un año, primero se establece una base imponible sobre todos los rendimientos obtenidos y después se procede a una base liquidable, que es el resultado de disminuir la base imponible en el remanente de las reducciones por tributación conjunta o pensiones compensatorias.
Esa base liquidable mantiene en su versión consolidada -la autonómica más la estatal- un tipo aplicable del 19 % entre los 0 y los 6.000 euros, y es el tramo que Vox quiere dejar al 0 % para compensar la pérdida de poder adquisitivo que han sufrido las familias españolas por las «nefastas políticas en materia económica y tributarias llevadas a cabo por el Gobierno».
Acusan al Gobierno de subir 69 veces los impuestos
En su iniciativa, el grupo parlamentario critica que, desde que gobierna Pedro Sánchez, el Ejecutivo ha subido hasta en 69 ocasiones los impuestos, mientras que la recaudación por el IRPF ha aumentado en un 38,42 % entre 2019 y 2023, lo que ha afectado también al ahorro de los españoles.
«Desde el año 2010 se ha producido una importante escalada recaudatoria por la vía de la base del ahorro del IRPF. Los españoles han pasado de tributar el 18 % por las rentas imputadas a dicha base a soportar cinco tramos que van desde el 19 % al 28 %», lamentan los de Santiago Abascal.
Vox denuncia que el impacto impositivo afecta especialmente a las familias de ingresos medios y bajos, ya que «tienen menor capacidad para absorber las cargas fiscales adicionales debido a sus limitadas ingresos imponibles; los impuestos más altos reducen aún más su capacidad para ahorrar e invertir; y tienen menor acceso a estrategias de inversión en comparación con familias de renta o patrimonio elevado».
Además, la formación de Santiago Abascal se refiere también a los productos de inversión a largo plazo que, aunque tengan «beneficios fiscales para los ahorradores», su rescate «supone una penalización fiscal muy alta para ser soportada por las rentas medias y bajas», lo que «pone en un lugar muy difícil a las familias que, por contingencias no previstas, necesitan rescatar estos productos de ahorro para hacer frente a sus emergencias».
En definitiva, el grupo señala que la pérdida de poder adquisitivo, el impacto negativo de la inflación y la necesidad de incentivar el ahorro privado y que este no pierda valor, son razones «contundentes» para considerar la exención de los primeros 6.000 euros de rendimientos del ahorro en el IRPF.