Las herencias sin dueño se convierten en un problema social y económico en España
Cuando una persona fallece sin haber designado herederos, y no hay familiares que reclamen la herencia, esta se convierte en una herencia vacante
En España, las herencias sin dueño o vacantes han sido durante mucho tiempo un enigma jurídico tanto para las autoridades como para los posibles herederos.
Estas herencias, que carecen de beneficiarios identificables o reclamados, pueden quedar en el limbo durante años mientras se intenta determinar su destino. Desde Heritae, la primera startup española dedicada exclusivamente a gestionar herencias, explican qué «el fenómeno de las herencias sin dueño no es nuevo en España, pero en los últimos años ha ganado relevancia debido al envejecimiento de la población y al creciente número de personas que fallecen sin dejar testamento o sin familiares cercanos conocidos»
Herencias sin herederos
Según datos del Consejo General del Notariado, alrededor de un 10 % de las herencias en España caen en esta categoría, un porcentaje que ha ido en aumento.
«Cuando una persona fallece sin haber designado herederos, y no hay familiares que reclamen la herencia, esta se convierte en una herencia vacante», detallan los abogados de Heritae. En tal caso, es el Estado quien, a través de la Administración General del Estado o las Comunidades Autónomas, se convierte en el heredero en última instancia.
Este proceso puede ser largo y complicado, especialmente cuando la herencia incluye deudas que superan los activosHeritae
«Este proceso, sin embargo, puede ser largo y complicado, especialmente cuando hay bienes inmuebles involucrados o cuando la herencia incluye deudas que superan los activos», detallan los abogados de Heritae.
Al Estado
Tradicionalmente, cuando no se logra localizar a los herederos, la herencia se transfiere al Estado. En teoría, este proceso debería ser sencillo. No obstante, la realidad es que el proceso es largo y engorroso. En ocasiones, las propiedades permanecen en un estado de abandono durante años, generando un problema social y económico para los municipios donde se ubican. Además, los posibles herederos que podrían tener derecho a estos bienes a menudo desconocen su existencia, lo que complica aún más la situación.
En muchos casos, los herederos ni siquiera son conscientes de que tienen derecho a una herenciaHeritae
Desde Heritae, explican que: «En muchos casos, los herederos ni siquiera son conscientes de que tienen derecho a una herencia. En ese momento se debe rastrear y localizar a estas personas, y guiarlas a través del proceso legal necesario para que puedan reclamar lo que les pertenece».
El proceso de identificación y adjudicación de herencias vacantes es complejo y requiere una estrecha colaboración con notarios, registradores y otros profesionales del sector jurídico.
Impacto social
El impacto de las herencias sin dueño va más allá del ámbito legal. Estas herencias suelen incluir bienes inmuebles que, cuando quedan en el limbo, pueden deteriorarse y convertirse en un problema para algunos municipios. Además, en algunos casos, las deudas asociadas a estas herencias pueden afectar a acreedores que nunca llegan a cobrar lo que se les debe.
«Recuperar estos bienes y ponerlos en circulación no solo beneficia a los herederos, sino también a las comunidades donde se encuentran», señalan desde Heritae.