La crisis ferroviaria que los españoles vivieron el pasado verano se sigue prolongando en el tiempo a pesar de que el Congreso de los Diputados reprobara la semana pasada al ministro de transportes Óscar Puente. Los usuarios de Renfe han sufrido este fin de semana retrasos y cancelaciones en trenes de Cercanías y en trenes de alta velocidad que unen las conexiones entre Madrid, Valencia y Murcia.
Un problema producido tras el descarrilamiento de un convoy sin pasajeros entre Atocha y Chamartín el pasado sábado. A lo que se le suma la presencia no autorizada de un individuo en la vía. Unos 13.700 personas se han visto afectadas por ambos sucesos. «Lo hemos sufrido en nuestras carnes», decía unas señoras ante el micrófono de El Debate que reconocía que su nieto no pudo tomar un tren a tiempo.
«Nos están fastidiando», comentaba una joven. «Es muy raro que pase tanto a menudo», decía otra señora que le extrañaba que dichas incidencias se produzcan de manera repetitiva. Aunque es cierto que hay otros viajeros que «no han tenido ningún problema». Así lo ha reconocido un hombre a las puertas de la estación de Chamartín este lunes por la mañana.
Aunque el desencanto de los usuarios con el Ministerio de Transportes se ha podido apreciar claramente en las redes sociales. De hecho, un perfil en X (antes llamado Twitter) lamentaba al ministro Puente lo ocurrido. Ante ello, el socialista respondía negando cualquier responsabilidad de su ministerio en lo ocurrido. «Está fuera de lugar», comentaba una señora. «¡Él nunca tiene la culpa!», exclamaba otro caballero. Mientras otro reconocía no tener «ninguna opinión formada al respecto».
«Haría un gran favor a España»
Cuando se les pregunta a los españoles si consideran correcto que Óscar Puente, las respuestas son muy diversas. «Ojalá lo haga, haría un gran favor a España», sostenía una mujer. «Creo que esto necesita una solución», añadía una chica. Paralelamente un joven decía: «no es decisión mía, lo dejo en otras manos». «Yo no la pido, desde luego», finalizaba una ciudadana.