La ejecución de los fondos UE se ralentiza ante la acumulación de grandes proyectos

Frenazo en la ejecución de los fondos europeos. El índice de resolución de las convocatorias con fondos NextGeneration se sitúa en los nueve primeros meses de 2024 en el 15,65 %, frente al 28 % del mismo periodo del año anterior, advierten desde LLYC, que destaca que se está produciendo una ralentización en el ritmo de ejecución en los últimos meses.

La consultora, que cuenta con una unidad especializada en el seguimiento de estas ayudas, atribuye el frenazo a la «acumulación del lanzamiento en el segundo semestre de convocatorias con importes muy elevados, así como los extensos plazos de resolución de muchas convocatorias».

En concreto, menciona las relacionadas con el hidrógeno o la cadena de valor de las renovables. También el recurso a la la concurrencia no competitiva en grandes convocatorias, como el Perte VEC (vehículo eléctrico) y el descarbonización. Ello «está alargando los tiempos de resolución final de esas convocatorias, aunque por las resoluciones parciales se evidencia que se está logrando mejorar la tasa de adjudicación en comparación con convocatorias anteriores lanzadas mediante concurrencia competitiva».

Según LLYC, de los 83.140 millones de euros asignados a España en la denominada adenda del plan de recuperación, se han comprometido 32.414 millones de euros, el 38,99 %. En cuanto a los fondos no reembolsables, se han comprometido 10.454 millones de euros en los primeros nueve meses del año, lo que representa el 62,24 % de lo comprometido a la misma altura de 2023.

108.495 millones comprometidos

Los importes se han destinado, en su mayoría, al impulso de las energías renovables, la descarbonización industrial, la digitalización, las infraestructuras o la innovación tecnológica. Y el Estado es quién ha llevado la batuta, con 7.305 millones de euros comprometidos, frente a los 7.222 de 2023. Pese a ello, el volumen de licitaciones de la AGE es este año de 1.945 millones, frente a los 3.836 de hace un año.

Teniendo en cuenta la cuantía total de los fondos destinados a España, 163.801 millones, el 66,01 % se han comprometido, unos 108.495 millones. Del total de fondos no reembolsables, se han comprometido 75.820 millones de euros, quedando un 6 % por comprometer.

Desde LLYC destacan también la reducción «considerable» del ritmo de transferencia a las comunidades autónomas. «Apenas ha alcanzado una cuarta parte de lo transferido en el mismo período de 2023 (1.204 millones frente a 4.356 a septiembre del año pasado). En la parte de los fondos reembolsables (préstamos de la Adenda), falta concretar la distribución de los 20.000 millones de euros en préstamos del Fondo de Resiliencia Autonómico (FRA)», afirman.

El FRA echa a andar

Precisamente este pasado miércoles se reunió por primera vez el Consejo de Inversión del FRA, según trasladó el ministerio de Economía. Este consejo será el encargado de aprobar los proyectos presentados para la financiación directa y de aprobar la selección de los intermediarios financieros en el instrumento indirecto de desarrollo urbano.

En la reunión participaron representantes de las Comunidades y ciudades autónomas, la FEMP, la Oficina de Asuntos Económicos y G-20, el Banco Europeo de Inversiones (BEI) y el propio ministerio de Carlos Cuerpo, que da ya por «plenamente operativo» el Fondo, que nació con reticencias por parte de las comunidades autónomas.

En dicha reunión se analizaron los primeros proyectos impulsados por entidades públicas y privadas. Asimismo se aprobó un fondo directo de cofinanciación, que según Economía otorgará préstamos a proyectos de gran tamaño, en áreas como transición verde y descarbonización, o infraestructuras sostenibles y sociales, en condiciones ventajosas y largos plazos de amortización.