Crisis en Duro Felguera: dimite el CEO que puso la SEPI, Jaime Argüelles, y cambia el presidente
La compañía arrastra importantes pérdidas en lo que va de año
Cambios de calado en Duro Felguera. La compañía ha comunicado este viernes la dimisión de su CEO, Jaime Argüelles, anticipada por este diario en el mes de abril. Argüelles fue impuesto por la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi) en 2021 tras un rescate de 120 millones a la firma asturiana de ingeniería.
En paralelo, se ha designado presidente del Consejo de Administración al consejero ejecutivo a Eduardo Espinosa Bustamante, que releva a Jaime Isita Portilla tan solo cuatro meses después de su nombramiento, poco después de la compra de la compañía por parte de la mexicana Prodi y la portuguesa Mota Engil.
Portilla pasará a ser vicepresidente de un consejo al que se incorpora Nuno Mota como independiente. En paralelo, se ha nombrado a un nuevo director financiero, Guillermo de Alba Rodríguez, y a una nueva directora de asesoría jurídica, Susana Santos Álvarez.
La compañía, con sede en el parque tecnológico de Gijón, sorprendió en plena Semana Santa con unas pérdidas de 23 millones de euros en el primer trimestre, que se incrementaron a 26 millones en el resultado acumulado hasta septiembre. Además, acumula una deuda financiera bruta de 147,1 millones, con una facturación en los seis primeros meses del año de 157 millones de euros.
Según adelantó este diario, en la empresa achacan el desfase al proyecto con la india Tata en Países Bajos, que ha generado –según reconocen– un saldo negativo de 17 millones de euros. Pero aquel contrato se vendió de una forma bien diferente. Incluso cuando se comunicó en 2022, no solo se ponderaban los 100 millones de inversión sino que resultaría decisivo para cumplir con el plan de viabilidad que había impuesto la SEPI al entrar en la compañía en 2021, precisamente con Jaime Arguelles como defensor y abanderado del contrato.
La compañía mantiene además un contencioso con Argelia por un ciclo combinado en Djelfa, lo que ha motivado que, según Expansión, la CNMV haya puesto bajo vigilancia sus estados financieros. Además, mantiene una reclamación de 100 millones con Venezuela por la planta eléctrica Termocentro.
Una deuda mencionada en el informe de la UCO sobre el caso Koldo / Ábalos a cuenta de la reunión del ex ministro con la vicepresidenta del país, Delcy Rodríguez. «La gestión que acordamos en favor de las empresas españolas ha permitido que Duro Felguera haya cobrado una importante deuda», trasladó Ábalos a Pedro Sánchez, sin que haya constancia de que, hasta la fecha, haya recuperado esta cantidad. La Fiscalía Anticorrupción solicitó, en julio, una multa de 160 millones de euros por presuntos sobornos relacionados con este proyecto.