Endesa prioriza las redes a las renovables en su nuevo plan estratégico
La energética eleva sus inversiones a 9.600 millones y reorienta su apuesta verde para priorizar el negocio hidroeléctrico al solar
Endesa impulsará sus inversiones para el periodo 2025-2027 hasta la cifra récord de 9.600 millones de euros, casi el 8 % con respecto a la hoja de ruta anterior, con 700 millones más. La energética que dirige José Bogas destinará el grueso de esta cantidad a redes eléctricas, mientras que reduce su inversión a renovables hasta 3.700 millones (un 14 % menos que la estimación anterior).
La compañía ve grandes oportunidades en negocios como los data centers y en la creciente electrificación de la economía para cumplir con los objetivos de emisiones impuestos por la Unión Europea. Pero sobre todo, constata que el cumplimiento del PNIEC –que exige triplicar el volumen actual de inversión en redes hasta finales de la década– desbloqueará al fin el incremento retributivo a las redes, abriendo una importante oportunidad de negocio.
«Estábamos esperando las señales del Gobierno para la remuneración (de redes)», ha afirmado Bogas en un encuentro con analistas, cifrando en unos 5.200 millones al año las necesidades previstas. «Hemos considerado en nuestro plan una remuneración del 7,5 %, pero estaremos confortables con una regulación menor, si hay mejoras en otros asuntos».
Del lado contrario, la compañía ha optado por reorientar sus inversiones en energías renovables, en un giro adelantado la semana pasada con la compra a Acciona Energía de 626 MW en activos hidroeléctricos por 1.000 millones. Destinará a este área de negocio 3.700 millones, un 14 % menos que en el plan precedente, reduciendo su exposición a la solar y centrándose en cambio en los hidroeléctricos, «de mayor valor».
En la presentación del plan estratégico, que coincide con el 80 aniversario de la compañía, Bogas ha adelantado además que espera alcanzar este año un beneficio ordinario neto de 1.800 millones de euros, y alcanzando un resultado bruto de explotación (Ebitda) de 5.200 millones de euros, en el rango alto de la estimación anunciada hace un año.
En lo que se refiere a la retribución a sus accionistas, la eléctrica garantiza un dividendo mínimo de un euro por acción hasta 2027, extiende el 70 % de pay out a todo el plan y eleva casi un 10 % la remuneración prevista para 2024, hasta 1,2 euros por título.
Para el final del plan, en 2027, el grupo, controlado por la italiana Enel con una participación del 70 % en su capital aspira a alcanzar un Ebitda de hasta 5.900 millones de euros, un resultado ordinario neto de hasta 2.200 millones de euros y una deuda neta de entre 10.000 y 11.000 millones de euros.
Una situación «muy confusa»
Bogas también ha sido cuestionado por el espectáculo de la Comisión de Hacienda del Congreso de este lunes, en el que el PSOE accedió a intentar una prórroga de un año al impuesto energético con sus socios de izquierdas a pesar de haber renunciado previamente a mantenerlo. «Todo es ahora mismo muy confuso en España en lo referido a la regulación», ha lamentado el directivo, poniendo en cuestión que el Congreso vaya a validar dicha promesa y refiriéndose al comunicado posterior de Hacienda
«Ese Real Decreto aun debe ser aprobado por el Parlamento. Si nada cambia, será imposible de mantener. Este impuesto no debería ser aprobado: es discriminatorio respecto a los rivales, nos sitúa en desventaja competitiva y más importante aún, no es el momento de tasar a los planes de transición energética», ha señalado Bogas.