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Sede de Thyssenkrupp en Duisburgo.DPA vía EP

Thyssenkrupp recortará 5.000 puestos y externalizará otros 6.000 para 2030

El grupo ha presentado un plan para adaptar su capacidad de producción

El grupo industrial alemán Thyssenkrupp ha informado este lunes de que recortará unos 5.000 puestos de trabajo de su filial de acero para 2030, mientras que otros 6.000 empleos se verán afectados por las escisiones o el traspaso a empresas externas.

Thyssenkrupp Steel Europe (TKSE) ha presentado un plan para adaptar su capacidad de producción, que supondrá una reducción significativa de puestos de trabajo y de costes de personal.

Concretamente, la compañía espera que se pierdan unos 5.000 puestos de trabajo hasta 2030 debido al ajuste de la red de producción y a la racionalización de la administración, al tiempo que otros 6.000 se transferirán a proveedores externos o se reducirán a través de la venta de sus actividades empresariales.

Además, los costes de personal disminuirán una media del 10 % en los próximos años, aunque la empresa ha afirmado que su objetivo último «sigue siendo evitar los despidos».

Thyssenkrupp Steel prevé reducir sus capacidades de producción desde los 11,5 millones de toneladas de acero al año hasta los entre 8,7 a 9 millones, para así adaptarse a la demanda futura del mercado.

La compañía espera que parte de esta reducción de sus capacidades se complete mediante la separación de las plantas de Krupp Mannesmann (HKM) a través de la venta de acciones. Si esto no sucede, también se podrían dar «escenarios de cierre amistosos».

En paralelo, la multinacional quiere reducir su independencia del sector de acero, por ello, la participación de la empresa energética checa EP, propiedad del multimillonario Daniel Kretinsky, en Thyssenkrupp Steel aumentará desde el 20 % al 50 %.

De este modo, la empresa pretende responder a los cambios estructurales en el mercado europeo, en un contexto en el que el exceso de capacidad y el aumento de las importaciones baratas, en especial de Asia, lastran cada vez más su competitividad.

«El objetivo es conseguir que Thyssenkrupp Steel sea rentable, competitiva y climáticamente neutra a largo plazo», afirman desde la compañía.