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Turistas en Málaga se niegan a dar datos de su tarjeta de crédito por el nuevo registro de viajeros

Consideran que vulnera la normativa de protección de datos

La entrada en vigor este lunes del nuevo registro de viajeros ha arrancado en Málaga con la negativa de algunos huéspedes a suministrar diversos datos que establece el real decreto, como los de la tarjeta de crédito o cuenta bancaria, según ha asegurado la patronal hotelera de la Costa del Sol (Aehcos).

El vicepresidente ejecutivo de la asociación, Javier Hernández, ha informado de las «incidencias» que tuvo en las primeras horas de funcionamiento la plataforma ses.hospedajes, gestionada por la Secretaría de Estado de Seguridad del Ministerio del Interior, como la «falta de operatividad» durante la mañana.

Al no estar activa en determinados momentos, ha habido establecimientos que no han podido registrarse para enviar los datos, para lo que disponen de un plazo de 24 horas, ha indicado.

«Tenemos huéspedes que se niegan a suministrarnos datos», ha señalado Hernández. Ha detallado que, principalmente, rechazan aportar información relativa a la tarjeta de crédito, el número de cuenta bancaria o el grado de parentesco cuando en el grupo hay menores de 14 años.

Ha habido viajeros «sorprendidos y extrañados» por la petición de información personal que exige el real decreto, debido a que consideran que vulnera la protección de datos.

Según Aehcos, el nuevo registro requiere que se aporten «más de 46 datos, 26 más que con la anterior normativa», cuando se hacía ante la Policía Nacional completando un formulario en el sistema Webpol.

Los hoteleros también tienen dificultades para que los PMS, que son los sistemas de gestión por los que se registran los viajeros, puedan enviar los datos a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Muchas de estas empresas comunican que «tardarían seis meses» para que exista un automatismo en el registro.

A la hora de rellenar de forma manual los datos de un viajero, se tarda unos 15 minutos en cada registro, ha afirmado.

La pasada semana, la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos turísticos (Cehat) anunció que estudiará acciones legales contra el real decreto que establece el nuevo registro, ante el impacto negativo que supondrá para el sector y los viajeros.

Los hoteleros mantienen que se ven obligados a cumplir con una normativa «confusa y desproporcionada» y que vulnera varias directivas europeas relacionadas con la protección de datos y los sistemas de pago; y aseguran que España no puede permitirse que entre en vigor sin que se hayan resuelto sus «múltiples defectos».

La patronal malagueña respaldó este anuncio al considerar que la nueva normativa no solo afecta negativamente a los turistas internacionales, sino también a los españoles por los «complejos» trámites a los que deberán enfrentarse.