Los mercados europeos se contagian del miedo a una recesión capaz de tumbar la economía

El temor a una recesión de la economía global comienza a afectar a los mercados. Las bolsas de medio mundo firmaron ayer un lunes negro, con caídas cercanas al 2 %. El Ibex 35 se dejó un 2,5 %, arrastrando un retroceso del 7,5 % en las tres últimas sesiones. En la media sesión, el selectivo español se dejaba un 0,27 %, hasta los 8.200 puntos.

Más abultadas fueron los recortes firmados este lunes en Wall Street. El S&P500 se dejó casi un 4 %, contagiando a su vez a las principales plazas asiáticas. Seúl cedió un 0,46 %, cerrando en rojo por sexta jornada consecutiva.

Los mercados miden así el termómetro de lo que está por llegar. Las consecuencias de las medidas adoptadas por la Reserva Federal de Estados Unidos y por el BCE, empujan a las economías americana y europea a un traspié. La Fed comienza hoy una reunión en la que podría consensuarse una subida del referencial de tres cuartos de punto, la primera de este tipo desde 1994. La pasada semana, el Banco Central Europeo anunció el final de las compras de deuda, y el inicio de una subida de los tipos por fases. Los primeros 25 puntos básicos se aplicarán en julio. Tras ello, Lagarde volverá a anunciar un incremento similar en septiembre.

Todo ello, podría generar tensiones en las finanzas de los países comunitarios. Está prevista una contracción del crédito y de la financiación de las empresas, lo que podría provocar una caída generalizada del consumo y un aumento del desempleo. Ambos factores, unidos a la crisis de inflación, podrían afectar al avance del PIB.

En el calendario europeo, espera la reactivación de las reglas de disciplina fiscal que demandará un batería de esfuerzos por parte de varios países, entre ellos España. En 2024 volverá a levantarse el límite del 3 % para el déficit y del 60 % para la deuda pública. Todo ello exige un compromiso de contención del gasto público que Bruselas ya ha empezado a recomendar a Madrid.

En paralelo avanza el riesgo país español. El final de las compras por parte del BCE hundió este lunes el rendimiento del bono a diez años un 2,97 %. La prima de riesgo española escaló a los 135 puntos básicos, una cifra que no se veía desde los días más duros del confinamiento de 2020.