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Lu Tolstova

Inmobiliario

El pago de la entrada: el gran muro que impide el acceso a la vivienda

La inversión inicial necesaria para acceder a un hipoteca aleja a los ciudadanos de la compra de una vivienda. Las inmobiliarias piden al Gobierno un aval público para aquellos con ingresos estables

La escalada del Euribor sigue endureciendo el acceso a la vivienda. Sin embargo, los ciudadanos y los expertos coinciden: la gran traba que impide la compra de un inmueble es el desembolso de la entrada. La mayoría de los créditos hipotecarios tan solo cubren un máximo del 80 % del valor de la vivienda, dejando el otro 20 % en la capacidad de ahorro de los clientes.

El muro es mayor entre los más jóvenes, obligados a esperar años para acumular los ingresos necesarios. Buena parte de los menores de 35 años debe acudir a la ayuda de sus padres para poder afrontar el pago inicial.

Buscamos bancos que ofrecieran una hipoteca del 100 % y fue imposibleCarlos (36 años)Propietario de una vivienda en Madrid

«Solo es viable comprar una casa si te ayuda un familiar con un préstamo personal y si vives en pareja. En nuestro caso tenemos la suerte de cubrir la entrada y un poco más, con el propósito de bajar el importe mensual al banco y añadir los primeros años la devolución a ese familiar», afirma Carlos, que a sus 36 años acaba de adquirir una vivienda en un barrio de la periferia de Madrid.

Su piso, de 200.000 euros, exigía el pago de 40.000 euros de entrada más impuestos y gastos notariales. «Desde el primer momento estuvimos buscando bancos que ofrecieran una hipoteca del 100 % y fue imposible. El máximo es el 80 %, y dependiendo de la tasación del piso. A eso tuvimos que añadir 14.000 en impuestos», añade. A ello se suma el endurecimiento de las condiciones crediticias derivado de la tormenta de la inflación.

¿Un aval público para acercar a los jóvenes a la vivienda?

Para romper esa frontera, la Federación de Asociaciones Inmobiliarias ha lanzado al Gobierno una propuesta. Solicitan que sea la Administración central la que avale el importe exigido para la entrada, allanado el acceso de los jóvenes a una vivienda.

En un comunicado, las inmobiliarias explican que este aval público estaría dirigido a compradores con ingresos estables, pero sin ahorros suficientes. Su aplicación sería de carácter temporal, es decir, que se extinguiría cuando el beneficiario haya pagado el 20 % del préstamo el aval.

La propuesta coincide con la negociación que Gobierno y principales entidades bancarias mantienen desde hace semanas. CaixaBank lanzó el guante al sector planteando la posibilidad de congelar las cuotas hipotecarias para amortiguar el impacto que las subidas de los tipos de interés están teniendo sobre los clientes. La idea fue bien recibida por el resto de los bancos, pero sobre todo por el ministerio de Economía. El departamento que dirige Nadia Calviño aplaudió la medida, y la incluyó dentro de la negociación abierta con la patronal de la banca.

En la mesa de las conversaciones se encuentra una posible reforma del Código de Buenas Prácticas aprobado en 2012. El objetivo inicial es extender la iniciativa –que incluye ayudas a los hogares más vulnerables– a rentas menos bajas. Según ha podido confirmar El Debate, la negociación avanza sin grandes novedades. El impuesto a la banca impulsado por el Gobierno podría ser un obstáculo para la rápida resolución del acuerdo.