Se dice que el sueño polifásico es la metodología de sueño de las mentes pensantes, de los grandes filósofos y las grandes mentes
SALUD
Sueño polifásico. ¿Qué es y por qué los grandes genios lo practican?
Leonardo Da Vinci, Napoleón o el propio Cristiano Ronaldo hoy en día, han puesto en práctica un tipo de descanso que consiste en dormir poco durante la noche e ir compensándolo con varias siestas durante el día aumentando así la productividad y creatividad.
Dormir es fundamental para poder vivir. Es una necesidad biológica que permite restablecer las funciones físicas y psicológicas de una persona para que funcione a pleno rendimiento durante el tiempo que permanecemos despiertos. Que lo vayamos adaptando según nuestros gustos y necesidades es otra cosa, al igual que lo que «sirve» para unos puede ser totalmente contraproducente para otros. Es cierto, que, aunque el organismo necesita una media de horas al día, no todo el mundo tiene las mismas necesidades de descanso, por eso existen diferentes formas de dormir. Para ponernos en contexto y tal como nos cuenta la Dra. Irene Rubio Bollinger, responsable de la unidad de sueño del Hospital Quironsalud Sur podemos decir que existen tres tipos distintos de sueños:
- El sueño monofásico: Es el que practicamos la mayoría de nosotros y que oscila en dormir entre 6 y 7 horas seguidas por la noche.
- El sueño bifásico: Es el que se divide en dos tramos: un tramo de 4-6 horas por la noche y una siesta después de comer.
- El sueño polifásico: comprende periodos de sueño de no más de 3 horas seguidas repartidos entre el día y la noche reduciendo el tiempo total de sueño.
Si nos centramos en este último, podríamos decir que este tipo de el sueño significa «sueño dividido en varios tiempos» a lo que rápidamente tendemos a pensar ¿es realmente sano? ¿puede ser suficiente para el cuerpo el humano?
Dra. Irene Rubio Bollinger, responsable de la unidad de sueño de del Hospital Quironsalud Sur
«El sueño dividido en fases/ polifásico pretende cambiar el ciclo sueño vigilia habitual pensando en mejorar el rendimiento y tener más tiempo para otras cosas.»
Tal y como nos aclara la propia Dra. Bollinger La respuesta es no. La ciencia nos dice que este tipo de sueño puede tener algunos inconvenientes. Muchos estudios señalan como negativo que dormir menos de 6-7 horas de un tirón puede producir una falta de sueño que se va acumulando y que puede producir problemas de salud y afectación de capacidades cognitivas. Igualmente podría alterar la secreción hormonal o provocar alteraciones metabólicas que pueden influir en el desarrollo de enfermedades como la diabetes e hipertensión.
Los sueños de los genios
Pese a lo que hemos dicho anteriormente es cierto que a lo largo de la historia y en hoy en día son muchos los que lo practican. El conocido Leonardo Da Vinci dormía no más de 20 minutos cada poca hora, según el él estar más tiempo despierto, le permitía tener más despejada la mente y poder ser mucho más productivo. Es lo que el mismo denominaba «sueño interruptus».
«El sueño bifásico trata de dividir el sueño en dos etapas: por lo general, la noche es la de mayor duración y la siesta al comienzo de la tarde»
Por su parte, Napoleón Bonaparte defendía otra media: «seis para un hombre, siete para una mujer, ocho para un tonto». El militar y político francés revindicaba la utilidad de dormir pocas horas, Aunque tenemos que puntualizar que no era del todo cierto ya que se sabía que compensaba este déficit de sueño con algunas siestas diurnas. Tenía tal capacidad de dormir que incluso se decía que podía hacerlo mientras cabalgaba.
Si nos situamos en personajes más actuales, el propio jugador de fútbol Cristiano Ronaldo parece que reparte su sueño en ciclos de 90 minutos alternando con sus entrenamientos y la vigilia, o el propio Donal Trump el que fuera presidente de Estados Unidos declaró descansar tres o cuatro horas de sueño al día.
Por lo contrario, otros personajes han mostrado costumbres totalmente diferentes a las que también le han achacado virtudes. Albert Einstein dormía hasta 12 horas seguidas y refería que muchos de sus descubrimientos se producían mientras descansaba.
«El sueño polifásico podría ser adecuado en ciertas profesiones como médicos que hacen guardias o pilotos de avión ya que tienen que romper con los periodos de sueño habituales»
Por lo cual, como conclusión, la Dra. Bollinger, nos cuenta que lo lógico es tener en cuenta las necesidades propias de cada uno y nuestro ritmo natural de sueño -vigilia sin forzar ningún tipo de sueño en concreto. Es cierto que en países industrializados tenemos que ajustarnos en general a un patrón monofásico que quizás en algunas ocasiones podemos acompañar de alguna siesta postprandial corta. Es importante la cantidad y la calidad y ajustarse a las circunstancias personales de cada uno para tener un descanso adecuado y saludable.