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Examen de selectividad en La RiojaEFE

Educación

Qué comunidades han disparado los aprobados con la selectividad en modo pandemia

Todas las regiones mejoran sus datos respecto a 2019 colocándose por encima del 90 % de aptos

La selectividad en modo pandemia sigue dando récords de aprobados y sobresalientes. Tras dos años más o menos titubeantes, las comunidades están empezando a ajustar los resultados y cada vez se reducen más las diferencias superando con creces el 90 %, aunque el nivel de exigencia difiere en cada una.

La Rioja es la comunidad que se ha quedado más cerca de alcanzar el pleno de aprobados en la convocatoria ordinaria de selectividad de este año. De hecho, el 99,36 % de los alumnos que se presentaron a los exámenes en esta autonomía fueron declarados aptos, y solamente nueve no lograron pasar el corte.

Otras once regiones presentan una tasa de aprobados entre sus estudiantes superior al 95 %. Es el caso de Castilla y León, Comunidad Valenciana, Navarra, País Vasco, Aragón, Cataluña o Asturias. También se supera esta cifra en Cantabria, Baleares, Andalucía y Castilla-La Mancha.

Por el contrario, Canarias obtiene la proporción más baja de aprobados a nivel nacional e incluso empeora sus resultados prepandemia. Apenas el 92,86 % de los bachilleres canarios consiguieron superar la EBAU, una cifra ligeramente inferior a la de 2018.

Aun así, la subida en el porcentaje de aptos en relación a 2019 ha sido generalizada. Baleares ha pasado de ser la comunidad con peores resultados –solo el 87,79 % de su alumnado aprobó en 2019– a situarse como la octava que presenta mejor balance (96,7 %).

Cataluña y Andalucía también han conseguido salir en los años de la pandemia de la parte baja de la clasificación, incrementando su ratio de aprobados entre 2019 y 2022 en seis puntos porcentuales. El segundo mayor alza lo experimenta La Rioja, que se ha convertido en la autonomía con mejores resultados al desplazar a Navarra y País Vasco, que apenas han crecido en este periodo.

Distrito único

El asunto es que, en un sistema educativo trasferido a las comunidades, el acceso a la universidad se produce mediante distrito único, por lo que desde el sector se está demandando una prueba común para todas las autonomías.

Educación, por su parte, ha descartado una prueba común, aunque sí ha avanzado que su cartera está trabajando en el borrador de una selectividad «algo más homogénea».

«Creo que para poder actuar o poder acertar en las distintas normativas educativas lo primero que tenemos que hacer es escuchar activamente a los agentes implicados y es en lo que estamos ahora mismo», aseguró Pilar Alegría, sin entrar en el detalle.

Además se da la circunstancia de que el año que viene entrarán en vigor los decretos curriculares de la Ley Celáa, unos textos desarrollados junto con las distintas comunidades que, previsiblemente, aumentarán las desigualdades entre las regiones.