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Una profesora de Primaria da clase.Efe

Educación

El lamento de una profesora que deja la docencia: «Mis alumnos me han vencido»

Una docente escribe una carta con las razones de su denuncia que acaba siendo viral: «Volveré cuando la Administración nos respete y apoye en ratios y recursos»

«Me han vencido». Esta es la frase de despedida a su profesión de una profesora que, en una carta al diario El País que se ha hecho viral en las redes sociales, explica los motivos por los que se ve forzada a decir adiós a la docencia.

«Volveré cuando la Administración nos respete y apoye en ratios y recursos; cuando, si me apuntan con una pistola de plástico, Dirección me apoye y no diga que es para tanto; cuando se acaben las sonrisas socarronas por parte del alumnado mientras cuestionan derechos básicos blandiendo argumentos de youtubers reaccionarios; cuando no te digan «mucho texto» por pedir que lean tres párrafos; cuando vuelvan a emocionarse por algo ajeno al móvil», dice, en referencia a quienes hasta hace poco habían sido sus alumnos.

Esther Villardón Grande, que es la autora de la carta, exhibe otros motivos que han encontrado eco en la profesión: «En definitiva, cuando se acabe esta anomia social. Los docentes intentamos combatirla, pero solos no podemos».

Decepción y desencanto

Ante la repercusión de sus palabras, la autora del texto, que es profesora de inglés y llevaba diez años impartiendo clases, los tres últimos en la escuela pública, ha sido entrevistada en la SER. «Yo me metí en esto pensando que podíamos hacer cosas, pero me encuentro un muro cuando me pongo a dar clase y tengo alumnos con necesidades especiales que no saben ni el castellano ni el inglés, que se van hundiendo cada vez más y no puedes hacer más por ellos por mucho que lo intentes».

Además, la docente no quiere pasar por alto las amenazas de algunos alumnos, a los que parece que no se presta demasiada atención. «No estoy enfadada con mis alumnos, son menores de edad y están en fase de formación, pero uno de ellos me apuntó con una pistola negra, que era de plástico. Dirección dijo que no era para tanto y que ese alumno era un payaso».

Situación del profesorado

Falta de personal, ratios al límite, graves carencias, o escaso reconocimiento a su labor suele ser la queja más repetida del sector en los sucesivos informes sobre la situación del profesorado.

Todo ello, en un contexto –con sus consiguientes excepciones– de un grado mínimo de autonomía de los centros, incentivos casi nulos para el docente y a cambio, resultados académicos cada vez peores.

A pesar de que es obvio de que el maestro es una pieza clave en cualquier sistema educativo, los estudios indican que el profesional español siente que su labor no influye como querría en el rendimiento, las notas y el futuro de sus alumnos.

Otro aspecto a destacar es el salario. Si bien el sueldo de los docentes de nuestro país no sale mal parado en relación con muchos otros países vecinos, hay quien opina que faltan extras para motivar al trabajador. Por ejemplo, y especialmente en la pública, la carrera profesional suele estar marcada por la antigüedad, pero no por el buen rendimiento. No parece que los resultados del día a día en las aulas tengan influencia en el montante final.