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Se insta al Ejecutivo a garantizar que todo el alumnado tenga derecho a una educación sexual sin estereotipos de géneroLu Tolstova

Educación

El País Vasco impone que la educación sexual «sin estereotipos de género» sea obligatoria en todos los centros

El Parlamento autonómico da luz verde a esta propuesta con los votos favorables de PNV, PSE, Bildu y Podemos, la abstención del PP y el rechazo de Vox

El País Vasco tendrá educación sexual obligatoria en la enseñanza. El Parlamento ha instado al Gobierno a garantizar que todos los centros de enseñanza incluyan contenidos específicos sobre educación afectiva y sexual.

La cámara autonómica ha debatido la propuesta no de ley de Elkarrekin Podemos y que ha contado con el voto afirmativo de este grupo, así como el PNV, EH Bildu y el PSE. En la votación, el PP se ha abstenido y ha recibido el voto en contra de Vox.

De esta manera, se insta al Ejecutivo a «garantizar que todo el alumnado» de esta comunidad autónoma «tenga derecho a una educación sexual sin estereotipos de género y a una reflexión crítica sobre el sistema sexo-género».

Con dicha enmienda se pretende establecer un marco para lograr la presencia de la educación afectiva y sexual, la cual se abordará «de forma transversal y con contenidos específicos adaptados a cada edad» en todos los niveles de la enseñanza. El objetivo será desarrollar «una actitud positiva y responsable hacia la sexualidad propia y la de los demás».

La propuesta desea que con ella, los centros educativos incorporen a su vez, mediante el plan de coeducación, «la perspectiva de género en su cultura, políticas y prácticas» en los materiales didácticos dirigidos al profesorado y al alumnado de las diferentes etapas educativas.

Para ello, los pasos a seguir pasarán por formar al profesorado «en educación sexual», ofreciendo itinerarios formativos que garanticen «la cualificación en coeducación» del conjunto de la comunidad educativa.

PP y Vox, en contra

Desde las filas del PP han criticado que el texto aprobado por la Cámara «parece un reglamento» que daría a entender que en esta materia aun «está todo por hacer», cuando en la mayoría de los casos tanto familias como docentes ya lo hacen bien. Por tanto, la proposición «no aporta nada».

La representante de Vox en el Parlamento ha denunciado que este plan «abandona la senda de la educación en igualdad y la defensa de la familia» y ha señalado que «la trampa del progresismo» pretende «contaminar con sus dogmas toda la educación» de los alumnos.