Esperanza Aguirre: «El gran error de mi vida política lo hubiera podido evitar si hubiese hecho caso a Eugenio Nasarre»

La exministra de Educación y expresidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, ha participado junto a Sandra Moneo, presidenta de la Comisión de Ciencia, Innovación y Universidades en el Congreso de los Diputados, Luis Centono, secretario general adjunto de Escuelas Católicas; y Francisco López Rupérez, expresidente del Consejo Escolar del Estado, en una mesa redonda titulada «Libertad de enseñanza e igualdad de oportunidades» en el acto In Memoriam a Eugenio Nasarre, que se celebra este lunes en la Universidad CEU San Pablo.

Aguirre ha apuntado que cuando José María Aznar era líder del Ejecutivo, «invitó a almorzar a la Moncloa a los tres expresidentes vivos, que eran Felipe González, Leopoldo Calvo-Sotelo y Adolfo Suárez», y que «en aquella comida se puso de manifiesto el problema que había en España con la Historia, y el problema de la Humanidades también». «Felipe González le dijo a Aznar que Eugenio Nasarre debía ponerse con Alfredo Pérez Rubalcaba para llegar a un acuerdo sobre cómo mejorar la enseñanza de la Historia y de las Humanidades, cosa que Eugenio hizo», ha agregado.

De esta manera, la exministra de Educación ha manifestado que «aquello se transformó a finales de 1997 en un proyecto de Real Decreto de mejora de las Humanidades en la secundaria», que recogía que «el Gobierno establecerá las enseñanzas mínimas comunes que todos los españoles deben conocer, cualquiera que sea el territorio donde estudien».

A continuación, Aguirre ha expresado que «aquel proyecto del decreto tuvo una respuesta por los nacionalistas» para que la «ministra de Educación retirase el proyecto», que en el Senado no salió «adelante», pero que en el Congreso «el PSOE votó en contra», por lo que la normativa se retiró. «Entonces yo, que eran una pazguata, recién llegada a la política nacional, me pareció que si la sede de la soberanía popular votaba en contra, me veía obligada a retirarlo», ha dictaminado Aguirre para después agregar que «Eugenio Nasarre me dijo algo que no olvidaré nunca», que «en la Asamblea Nacional Francesa no se hubiera aprobado jamás» una legislación que indicara «que el Gobierno no haga lo que la ley le obliga a hacer».

En consecuencia, ha señalado que «fue el gran error de mi vida política», que «hubiera podido evitar» si no hubiera retirado «ese proyecto » y hubiese «hecho caso a Eugenio Nasarre».

Por su parte, Moneo ha aseverado que «no hay nada más importante que que los padres podamos elegir la educación de nuestros hijos», y ha destacado -en relación con la política lingüística en algunas regiones- que «Eugenio trabajó en los últimos tiempos para que ese terrible ataque que se produce en las CCAA no fuese una realidad».

Además, Luis Centeno ha defendido «la libertad de las familias» para que elijan la educación de sus hijos en el marco de «la pluralidad educativa»; mientras que López Rupérez ha resaltado que «una de las cosas es que siempre me llamó la atención de Eugenio Nasarre» es que «tenía un criterio ponderado» y «prominente» sobre «cualquier cosa».