Fundado en 1910

Una persona pasea por la biblioteca de una universidadPexels

España está a la cola de los países de la OCDE en financiación educativa: la 23ª de 37

El promedio de inversión que cada universidad destina al alumno está un 20,7 % por debajo de la media

Como cada año, el informe de la Fundación Conocimiento y Desarrollo (CYD) arroja datos esclarecedores sobre el panorama universitario en España. En esta ocasión dicho estudio pone el foco sobre todo en la insuficiente inversión en educación superior y en la fuga de talentos que hace que el país se sitúe en las peores posiciones de entre los países de la OCDE.

El estudio CYD 2023 expone datos concretos. Las universidades españolas se sitúan en el puesto 23 de 37 del ranking elaborado por la OCDE en su informe Education at a Glance 2023. El puesto en el listado no es casual: el promedio de inversión que cada universidad destina al alumno está un 20,7 % por debajo de la media. Así en 2020 las universidades destinaron en promedio 14.361 dólares por alumno. Además, este gasto en educación de estudios superiores supuso el 1,46 % del PIB español frente al del 1,50 % de la OCDE.

«De hecho, en el año 2020, España destinó el 2,08 % del gasto público total a la educación superior frente al 2,35 % de la media de la Unión Europea y el 2,68 % de la OCDE», reza el informe. Por ello, indican, «la escasez de recursos está obligando a las universidades a hacer malabares con los recursos actuales para atender sus necesidades» y ponen de ejemplo la financiación alternativa (o fundraising) con captación de fondos filantrópicos aunque, aseguran, a día de hoy supone «una parte muy modesta (1-2 %) del presupuesto de las universidades españolas.

«España también difiere del promedio de la OCDE en la distribución del gasto en educación superior entre fuentes públicas y privadas, con una mayor participación relativa del sector privado (en 2020, 32,5 % en España, 29,9 % en la OCDE y 20,2 % en los países de la UE), que parece ir en aumento en comparación con hace una década (2012)», destacan.

Fuga de talentos

En el curso 2021-2022, 133.484 personas formaban parte de la plantilla del personal docente e investigador (PDI) de las universidades españolas. En la última década, las universidades públicas han sostenido una disminución continua del personal funcionario. El estudio las cifra en 7.924 menos que en el curso 2010-2011. Las fórmulas que ahora se practican para cubrir puestos vacantes tienen que ver más con la contratación de «profesores asociados, trabajadores a tiempo parcial y temporales».

De ahí la fuga de talentos al extranjero en busca de mejores condiciones laborales. «El sistema universitario español necesita llevar a cabo un relevante cambio generacional en el corto y medio plazo. Para hacer efectivo este cambio en una dirección ambiciosa, se deberán convocar un mayor número de plazas, lo que implica la necesidad de aumentar la financiación destinada a este fin y disponer de un sistema de selección adecuado. Ahora bien, las perspectivas de estabilización en la carrera académica deben ser atractivas para atraer candidatos de calidad», subraya el estudio.