Francia, Italia y Alemania presionan para que el español no sea obligatorio en los institutos de Brasil
Hablamos Español ha enviado una carta a José Manuel Albares, ministro de Exteriores, para que intervenga en defensa del castellano
El Senado de Brasil aprobó el pasado mes de junio una reforma educativa que vuelve obligatoria la enseñanza del español como lengua extranjera, junto al inglés, en los últimos tres años de escolaridad. Esta medida debe regresar a la Cámara de Diputados para discutir los cambios introducidos, ya que el texto originalmente aprobado por esta cámara en marzo consideraba el castellano apenas como idioma optativo.
Sin embargo, Francia, Italia y Alemania han intervenido para frenar la obligatoriedad del español en los instituto. En concreto ha sido la embajada de Francia en Brasil, con el apoyo de las representaciones diplomáticas de Italia y Alemania, quien ha trabajado en el Congreso Nacional para eliminar la exigencia del español en la Nueva Escuela Secundaria.
La agregada de cooperación educativa de la embajada de Francia en Brasil, Hélène Ducret, cree –según recoge CNN– que si el español fuera obligatorio en las escuelas brasileñas como segunda lengua las consecuencias «serían tremendas». «El español ya es la opción del 95 % de los brasileños que van a aprender una segunda lengua. Un mandato gubernamental para la educación secundaria sería catastrófico para otras lenguas. Estamos a favor del plurilingüismo», afirmó.
Unas presiones que, parece, han dado sus frutos y finalmente el Congreso ha elaborado un texto en el que el español no se incluye como obligatorio en las aulas. Este proyecto está ya solo a la espera de aprobación presidencial.
Carta de Hablamos Español
La organización Hablamos Español ha querido mover ficha y le ha enviado una carta al ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares. En la misiva, la plataforma muestra su «profunda preocupación y pena» tras la actuación de las embajadas de Francia, Italia y Alemania en Brasil contra la obligatoriedad del español en el sistema educativo brasileño.
Denuncian que, a pesar de la fortaleza de la lengua, con más de 500 millones de hablantes nativos en todo el mundo, las instituciones que la defienden son escasas. «Por desgracia, el Instituto Cervantes no puede realizar él solo la ingente tarea a la que nos enfrentamos y, seguramente, el tener que dedicar la mitad de su labor a la promoción de las otras lenguas de España, algo que ha cobrado intensidad en los últimos tiempos, resta impulso a la promoción y difusión del español y de la creación cultural en nuestra lengua común».
Gloria Lago, presidenta de Hablamos Español y firmante de la carta, subraya que el español y su enseñanza en un país como Brasil es «fundamental para la integración de toda la comunidad hispanoamericana, nos fortalece y beneficia a todos como hispanohablantes y prestigia a España como nación cuna de esta lengua».
El texto finaliza con el deseo de que la representación diplomática de España en Brasil reaccione ante lo que llaman un ataque a los intereses de España y de toda la comunidad hispanohablante.
Desde la asociación animan a los ciudadanos, tanto españoles como brasileños, a firmar la carta a Albares –se puede hacer en este enlace– como muestra de apoyo al castellano en Brasil y para que el Gobierno de España tome partido en esta pugna.