El Gobierno impone a un colegio de Ceuta impartir clases por las tardes para los menas ilegales

El Ministerio de Educación, Formación Profesional y Deportes (MEFPyD), liderado por la socialista Pilar Alegría, anunció el pasado 23 de septiembre la creación de hasta cuatro aulas de primera acogida para atender al grupo de menores de 16 años que han entrado irregularmente en Ceuta durante este verano.

En la disposición de la medida se justifica que «la llegada masiva de inmigrantes a la ciudad de Ceuta que está teniendo lugar durante los últimos meses ha generado una situación excepcional. La ciudad ha asumido la guarda de más de 500 menores que paulatinamente desde enero han ido llegando a la ciudad, y masivamente desde agosto, no existiendo certeza del tiempo que van a permanecer en esta situación».

Por otro lado, se apunta a que «el sistema educativo se va a ver fuertemente tensionado por la incorporación repentina de un número tan elevado de menores que sufren carencias lingüísticas y competenciales».

Es por esto que, según publicó el Boletín Oficial del Estado (BOE) el pasado 4 de octubre, la Secretaría de Estado de Educación de Ceuta ha dictado que el IES Abyla, sito en la ciudad, sea la sede de estas aulas de primera acogida, «para el funcionamiento, con carácter excepcional y temporal, de las mismas, la evaluación e inmersión lingüística, para el alumnado con necesidad específica de apoyo educativo», reza el documento oficial.

Estas aulas se desarrollarán en horario de tarde, con jornadas de cuatro horas, y cubrirán la etapa de educación secundaria obligatoria, con carácter temporal durante el curso 2024-2025, para el alumnado de entre 12 y los 16 años de edad recién incorporado al sistema educativo español y con desconocimiento del idioma o desfase curricular grave.

En cuanto al profesorado, el apoyo educativo a este grupo de menores inmigrantes será realizado por personal docente perteneciente al cuerpo de maestros, preferentemente con la especialidad de Educación Primaria. La coordinación recaerá en el jefe de estudios del centro. Además, sus horarios deberán coincidir con el de funcionamiento de las mismas.

Organización de las aulas

Tal y como informó el ministerio, cada maestro tendrá asignado un grupo formado por 15 alumnos, que recibirán un trato completamente personalizado. El equipo docente de las aulas realizará una valoración inicial del nivel de competencia lingüística en lengua castellana y del nivel de competencia curricular.

Estos menores serán agrupados en función del nivel de competencia lingüística y curricular de acuerdo con la valoración inicial, y permanecerán en las aulas el tiempo imprescindible para su incorporación a un grupo ordinario «con los apoyos que resulten necesarios».