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Daniel Martín Ferrand

Introducción al Bachillerato Internacional

En contra de lo que se suele pensar, el Programa del Diploma se puede estudiar con cualquier idioma como lengua vehicular, no es obligatorio hacerlo en inglés

¿Qué es?

El Bachillerato Internacional (IB), propiamente hablando, es una organización educativa que se define como sin ánimo de lucro, aunque entre los profesores circula el chiste de que es «sinónimo de lucro». El IB tiene presencia en países de todo el mundo, y ofrece una serie de estudios para todas las etapas e, incluso, para formación profesional.

Lo que popularmente se conoce como Bachillerato Internacional en realidad se llama Programa del Diploma (PD), y ocupa los dos últimos años de colegio, es decir, los dos cursos anteriores a la Universidad. Es decir, coincide con el Bachillerato Nacional. La principal diferencia es que solo hay exámenes oficiales a finales de segundo y, si no se consigue el Diploma, se considera que ni siquiera se ha aprobado 1º de Bachillerato.

En contra de lo que se suele pensar, el PD se puede estudiar con cualquier idioma como lengua vehicular. No es obligatorio hacerlo en inglés. De igual manera, aunque permite –no siempre facilita– acceder a universidades extranjeras, no solo es útil para los estudiantes que quieran emigrar para hacer la carrera.

Currículo

El Programa del Diploma consta de seis grupos de asignaturas y de tres componentes troncales.

Los grupos son:

• Estudios de Lengua y Literatura

• Adquisición de Lenguas (o lengua extranjera)

• Individuos y Sociedades (Historia, Empresa y gestión, Filosofía, etc.)

• Ciencias (Química, Física, Biología, etc.)

• Matemáticas (en dos variantes, como en el nacional)

• Artes (Artes Visuales, Cine, Danza, etc.)

Cada alumno debe elegir una asignatura de cada grupo para conformar un currículo a la carta. Tres asignaturas serán de Nivel Superior, y tres de Nivel Medio. La mayoría de los colegios españoles prescinden del grupo de Artes y, según querencias, se coge una más de Individuos y Sociedades o de Ciencias.

Así, un alumno puede estudiar Literatura, Inglés B, Empresa y Gestión, Biología, Matemáticas y Artes Visuales (o, por ejemplo, Física). Se puede aprobar el PD sin necesidad de estudiar Historia ni Filosofía. En principio, el acercamiento de cada asignatura es más comprensiva que memorística, porque el IB se jacta de formar el espíritu crítico dentro de una perspectiva responsable con el planeta y el prójimo, muy políticamente correcta.

Evaluación

En cada asignatura existe una evaluación interna que consiste en un trabajo de investigación que corrige el profesor y cuya puntuación se modera por los examinadores contratados por el IB entre los mismos profesores de los distintos colegios del mundo. La evaluación externa suele consistir en exámenes que se hacen a la misma hora en los distintos países que comparten determinados husos horarios. Las notas no se publican hasta principios de julio y, como en Selectividad, sin apenas feedback sobre por qué se ha sacado esa nota.

Cada asignatura se puntúa sobre 7, y se otorga según campana de Gauss, de manera que solo los que han sumado más puntos en cada asignatura obtienen la máxima nota. Sacar un 7 es muy difícil. Sacar un 4 es muy fácil. Según la normativa española, para calcular la nota equivalente en el bachillerato nacional basta con sumar 3 puntos. En el PD, por tanto, sacar un 10 es complejísimo, pero sacar un 7 es facilísimo, mucho más que según la ley española.

Para calcular la nota de la parte general de Selectividad se suman todos los puntos de las asignaturas (máximo, 42) y el resultado se divide entre 6. Y a eso se le suma 3. Para llegar a los 14 hay un mecanismo demasiado complejo para escribir en este resumen; para sumar esos 4 puntos habitualmente se acude a la UNED para realizar unos exámenes (las Pruebas de Competencias Específicas, o PCE) que son mucho más asequibles que la EVAU.

Componentes troncales

Los componentes troncales son la Monografía, Teoría del Conocimiento (TdC) y CAS (Creatividad, Acción y Servicio). La primera consiste en un trabajo de investigación de 4.000 palabras en alguna de las asignaturas. Pero no basta con obtener información y describir, sino que hay que responder analíticamente a una pregunta que el mismo alumno ha formulado.

TdC no se parece en nada a la Filosofía en su apartado epistemológico. Es un acercamiento a cómo funcionan distintas áreas de conocimiento (Matemáticas, Ciencias Humanas, Ciencias Naturales, Historia y Artes) y a cómo afecta nuestra manera de mirar el mundo a nuestra propia perspectiva de las cosas.

Se evalúan de manera compleja, un tanto abstrusa, con trabajos pero sin exámenes. El alumno debe sacar como mínimo una D tanto en la Monografía como en TdC. Una E en cualquiera de las dos supone suspender todo el PD. Luego, entre las dos pueden otorgar un máximo de 3 puntos de los 45 que como máximo puede sumar el PD. Estos tres puntos no afectan a la traslación a la nota española sobre 10.

CAS consiste en que el alumno, durante 18 meses, haga labores de voluntariado, trabajos de creación, ejercicio, una serie muy libre y variada de actividades que se alejen de lo meramente académico. Debe entregar un dossier que recoja pruebas de todo lo que ha realizado. Se califica simplemente como Apto o No Apto. Si no se es apto, se suspende todo el PD, aunque personalmente no conozco ningún caso.

Conclusión

Para los alumnos con interés y capacidad de trabajo –los que realmente cumplen con el perfil que el IB promociona– el PD es una tarea realmente exigente y compleja. Para estos alumnos sacar un 6 o un 7 supone un esfuerzo continuado y a veces extenuante. Para los alumnos que no trabajan tanto, pueden sacar una media de 5 (8 en la nota sobre 10) sin mayor esfuerzo (menudean los casos injustos, pues a veces sacan 5 alumnos con altos conocimientos, y otras sacan 5 alumnos que apenas saben nada; dichosa campana de Gauss). El IB exige para el aprobado 24 puntos y una serie de requisitos –una larga lista pero en cualquier caso asequibles– según las asignaturas sean de Nivel Medio o Superior.

El PD se imparte a clases con un menor número de alumnos. En los colegios privados, se compensa el hecho con un precio considerablemente superior al del Bachillerato Nacional. Y con la imposibilidad de cambiarse de colegio en el paso de 1º a 2º.

Para impartir PD un colegio tiene que pasar por una revisión supuestamente exhaustiva realizada por el IB. El proceso dura varios años –o no, en algunos casos– y se suele conceder la condición de colegio del IB aunque numerosos colegios carezcan de los propios elementos que el IB exige, como una biblioteca –en muchos colegios simplemente hay una biblioteca sin bibliotecario ni orden en los libros, con lo cual no es realmente una biblioteca– o laboratorios sin las condiciones mínimamente exigibles.

Ser colegio del IB te permite pertenecer a una comunidad de colegios de todo el mundo. El título del PD es reconocido por prácticamente toda la comunidad internacional. Y las notas más altas son un valor añadido al currículum de cualquier estudiante sobresaliente.