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Queman contenedores en la manifestación de CDR por el 1-O en BarcelonaEuropa Press

Cataluña

Intelectuales piden en un manifiesto la unión del constitucionalismo contra los independentistas

Joan López Alegre, Valentí Puig o Ferran Toutain están detrás de esta iniciativa

El constitucionalismo en Cataluña es invisible en las instituciones y no tiene el peso que le corresponde. Con este objetivo, un grupo de intelectuales ha impulsado un manifiesto, que se presentará en los próximos días, en el que piden que se articule «una confluencia política del mundo constitucionalista para presentar un único proyecto capaz de dar respuesta a los problemas reales de la sociedad catalana y derrotar en las urnas tanto al nacionalismo como al populismo» En definitiva, se trata de poder concretar una especie de «Cataluña Suma».

Entre los impulsores de este manifiesto está el profesor de comunicación política y exdiputado del PP catalán, Joan López Alegre, quien ha explicado que es importante «agitar el árbol» y que el constitucionalismo tenga «una estrategia clara» del mismo modo que la tiene el independentismo, «que es depredar todos los recursos del Estado y volverlo a hacer, o igual que el PSC, que ha renunciado a la representación de los catalanes no independentistas». «Si por separado no consiguen los resultados, que lo hagan unidos», sentenciaba López Alegre.

Invisibles

El empresario destacaba que el constitucionalimo es «invisible» prácticamente en las instituciones. En tres provincias catalanas, Lleida, Girona y Tarragona no tiene representación parlamentaria, o lo que es lo mismo, «250.000 catalanes constitucionalistas no tienen representación». Y otro dato a tener en cuenta, según el profesor, es que «la diferencia entre el PSOE y sus socios en el Congreso, en comparación con la oposición de Ciudadanos, PP y Vox es de 40 diputados. De estos diputados, la diferencia en Cataluña es de 36». 

Por lo tanto, según defiende López Alegre y se plasma también en el manifiesto, este problema no sólo afecta a los catalanes, sino también al conjunto de España «porque así es imposible que pueda haber un cambio, que es deseable en España» y también «la independencia es más factible» si no hay más concejales constitucionalistas, porque en estemos momentos, desde los ayuntamientos se hace «independencia cada día».

Otra de las cuestiones que pide el manifiesto es que los catalanes no independentistas «no sean moneda de cambio de intereses políticos a nivel nacional». Por eso, López Alegre considera que esta confluencia debe tener clara esta cuestión: «su leit motiv tiene que ser que jamás los votos de los catalanes no independentistas servirían para facilitar un gobierno que luego tuviera el apoyo de una fuerza independentista».

Cataluña es mucho más

De hecho, en el manifiesto se reprocha a los diferentes Gobiernos de España que hayan confundido una parte de Cataluña con el todo, y se dice que «hablar con el gobierno independentista de la Generalitat no es hablar con Cataluña. Cataluña es mucho más: sociedad civil, familias, empresas y autónomos muestran una realidad mucho más plural que la que se pretende hacer ver desde el gobierno autonómico».

Un manifiesto en el que también se hace una defensa del bilingüismo, de la neutralidad de las instituciones y «una Cataluña líder, leal con el conjunto de España, no una Cataluña que se proclame distinta o superior»