David Pérez: «Sánchez quiere cobrar peajes porque Madrid será la más perjudicada»

El consejero de Transportes de la Comunidad de Madrid, David Pérez, ha concedido una entrevista a El Debate para comentar la situación actual de Madrid en una consejería que cuenta con un 20 % más de presupuesto que en las pasadas cuentas. La inversión de este dinero, las bajadas de los precios en el transporte público y los problemas de los vecinos afectados por las obras de la línea 7B de Metro son algunos de los asuntos de los que ha dado su opinión.

–El uso de transporte público descendió con la llegada del Covid. ¿Cómo están las cifras ahora?

–Ahora mismo estamos en una recuperación del 80 % de los usuarios que había antes de la pandemia. Esa recuperación está siendo más rápida en los autobuses donde estamos al 85 %. Hay todavía un porcentaje que aún no ha vuelto, por ejemplo, por el teletrabajo.

–Sigue habiendo quejas respecto a las aglomeraciones en ciertos momentos del día. ¿Se plantea la Consejería de Transporte alguna mejora a este respecto?

–En este momento tenemos una frecuencia muy alta en las líneas de Metro. Al mismo tiempo hacemos un control para apreciar las concentraciones y reforzar estas frecuencias.

Además, se toman medidas para desinfectar diariamente todos los vagones de metro, los autobuses y todas nuestras infraestructuras y el Metro. También usamos la ventilación forzada para renovar el aire y, por supuesto, el cumplimiento de las normas básicas de mascarillas, distancia, etc. Yo no diría que hay un problema de acumulación de usuarios de una forma general. Puntualmente puede ocurrir en algún sitio, pero no es una cosa general. En los peores momentos de la pandemia hemos contado con la mayor frecuencia a pesar del bajo número de usuarios.

–¿Es mejor el Transporte Público en Madrid que en otras comunidades de España?

–Todas las comunidades autónomas cuentan con servicios de transporte adecuados y modernos. Pero yo sí creo que Madrid cuenta con la red de transportes más potente de España. Tenemos 300 kilómetros de metro, que serán 350 cuando culmine las actuales extensiones. Contamos con 2.500 kilómetros de carretera. Contamos con 4.000 autobuses que dan servicio a los 179 pueblos de la región, más los taxis y otros modos de transporte, que al final lo que consiguen es que tengamos una red muy potente y que cumple dos funciones, para mí muy importantes: la vertebración territorial y la competitividad.

Madrid cuenta con 300 km de Metro, que serán 350 con las extensiones

–Respecto a la vertebración territorial, hay una denominada España vaciada, pero también un Madrid vacío. Se ha aumentado la red para unirles con la ciudad, pero, ¿hay algún plan más a largo plazo para intentar disminuir este problema?

–Hay municipios que están a cien kilómetros de la capital, por ejemplo, en la Sierra Norte, donde además hay una situación geográfica complicada. Hay más de diez municipios que tienen menos de 100 habitantes. Al final, lógicamente, es imposible que en cada uno de esos municipios haya los mismos servicios. Los comparten de una manera comarcal. Nuestro objetivo es trabajar en una red mayor que pueda vincular esos municipios de tal forma que podamos comarcalizar los servicios. Al mismo tiempo hemos puesto en marcha ya un plan piloto en la Sierra Norte de taxi a demanda. También hemos abaratado los abonos transporte para las zonas C1 y C2, que las hemos suprimido para acercarlas a la zona B. Además de 13 nuevas líneas de autobús.

–La bajada de precio de los abonos que comentaba, ¿tiene límite?

–Desde luego que tiene límite y me atrevería a decir que ya estamos rozándolo. Los servicios públicos tienen que ser sostenibles financieramente. Una cosa es que haya una rentabilidad social por encima de la rentabilidad económica. Hay determinadas líneas de autobús o medios de transporte que son deficitarios económicamente, pero son necesarios. A las personas mayores les hemos bajado nuevamente el abono transporte y, probablemente, sea el único colectivo al que volvamos a hacer una rebaja. Ahora mismo está en prácticamente tres euros, pero lo vamos a hacer gratuito.

Hemos rozado el límite en la bajada del precio de los abonos

El transporte cuesta mucho dinero, pero está muy subvencionado en la Comunidad Madrid. Nosotros no queremos subir impuestos y tenemos que buscar el equilibrio.

–¿Y habrá subidas en otro sentido?

–No está previsto en este momento. Las únicas subidas en el transporte que nos tememos, son las que quiere imponer el Gobierno de España con su Ley de Movilidad. Lo han hecho sin escuchar a las comunidades autónomas y desde una perspectiva ideológica.

–¿Qué le parece, por ejemplo, el cobro de peajes que quieren establecer?

–Tiene un claro empeño indisimulado de subir impuestos e implantar peajes. Si se implantan los peajes, la comunidad más perjudicada será Madrid. Por eso quieren hacerlo y no hay derecho, porque los madrileños ya pagan con sus impuestos esas infraestructuras y quieren cobrarnos nuevamente.

–El presupuesto para su Consejería se ha aumentado en más de un 20 %. ¿En qué se va a invertir?

–Nuestro presupuesto son dos mil millones aproximadamente. Lo más costoso es el Metro de Madrid. Estamos invirtiendo 500 millones en hacerlo accesible y es complicado porque, en ocasiones, meter ascensores en redes urbanas complejas puede llegan a ser 20 millones por estación. Además, el Consorcio de Autobuses también tiene un coste elevado porque está muy subvencionado.

Hacer accesible una estación cuesta, a veces, veinte millones de euros

Más de un 50 % se destina a infraestructuras. El mes que viene comienzan las primeras obras. Por ejemplo, la conexión de la línea 3 con Metro Sur. Es un plan muy ambicioso e incluye la línea diagonal que atravesará toda la capital con una inversión de 1.800 millones de euros. Además, en este momento Madrid tiene cinco intercambiadores y se van a hacer otros cuatro.

–¿Se va, casi, a doblar el número de intercambiadores?

–Sí, serán nueve porque queremos cerrar un anillo que permita que cualquier persona que llegue a la capital por cualquier carretera tenga acceso a todo el transporte. Los intercambiadores son el corazón de la intermodalidad.

–La modernización ha llegado a aspectos como la estación de Gran Vía. ¿Podrán los madrileños usar el abono desde su teléfono móvil?

–Eso pasara a ser una realidad en muy pocos meses. En este momento ya se puede pagar el abono transporte a través del móvil. Ahora el usuario es una prioridad y queremos que tenga una información muy completa y a tiempo real para que pueda diseñar su plan de transporte.

Los madrileños podrán llevar el abono en su teléfono móvil

–Me atrevería a decir que la línea 7B de Metro ha sido su quebradero de cabeza en los últimos tiempos. ¿Quién puede solucionar la afectación que están sufriendo los vecinos de San Fernando de Henares en sus viviendas por las obras de Metro?

–No se equivoca usted al decir que es un gran quebradero de cabeza porque estamos muy preocupados por ello. Estamos trabajando en ello sin límite de horarios para asegurar la seguridad de los vecinos. Para ver este problema hay que retroceder 14 años cuando se hizo esa línea que ha generado desestabilización del suelo y que se ha visto agravado por otros factores que no están directamente relacionados con el Metro.

Nosotros estamos consolidando aquellas zonas en las que puede hacerse o demoliendo aquellas en las que no. Son decisiones muy difíciles y se toman con un criterio técnico. Allá donde detectamos riesgo, actuamos inmediatamente. Esta semana me he reunido con los vecinos para recoger sus propuestas y vamos a hacer más inspecciones. No nos vamos a desentender del problema.

También hay que tener en cuenta que el Ayuntamiento de San Fernando de Henares está utilizando políticamente este tema. Nosotros esperamos que el consistorio arrime el hombro porque se está tomando seis meses para darnos los certificados que nos permiten seguir trabajando.

–Hablando ahora del Partido Popular, parece que el clima de tensión ha disminuido entre Ayuso y Casado. ¿Cómo se está viviendo esto desde el partido?

–En el Partido Popular todos tenemos responsabilidades y tenemos suficiente trabajo como para estar dedicados plenamente a eso. Y en el caso de Casado, a dar respuesta a una creciente mayoría de españoles que reclaman un cambio en el Gobierno central.

Nosotros trabajamos por los ciudadanos a los que servimos y ese es nuestro espíritu. Y ahí se resume, desde luego, nuestra dedicación y nuestra preocupación de todos nosotros y por tanto, la mía. No voy a entrar en otras valoraciones. Lo que nos preocupa es lo que preocupa a los españoles de verdad: el empleo, la educación, la unidad de España y el que se haga un adecuado gasto de los fondos públicos.