Traspinedo despide a Esther López entre aplausos y con el deseo de que su muerte se esclarezca pronto
«Tenemos miedo. Necesitamos saber por qué murió», señalan los vecinos
Centenares de vecinos se han reunido este miércoles a las puertas de la iglesia de Traspinedo para despedir a Esther López, la joven de 35 años cuyo cadáver fue hallado este sábado en una cuneta de la localidad, tras 25 días desaparecida.
Con un sol abrasador, Esther ha realizado su último trayecto por las calles del pueblo arropada por familiares, amigos y vecinos que le han dedicado una sentida despedida en la que han predominado las muestras de cariño y muchos aplausos. «Estamos hechos polvo, ¡una chica tan joven!», ha expresado una vecina resumiendo el sentir de todo un pueblo que hoy seguía de luto. La hostelería no ha abierto y el Ayuntamiento se ha negado a ofrecer declaraciones «por respeto a la familia».
Tras el funeral de 45 minutos en el templo y una oración en la calle, tres coches engalanados con trece coronas de flores han encabezado la comitiva fúnebre, seguida de otros tantos vehículos particulares en los que viajaba su círculo más cercano en dirección al cementerio, para darle el último adiós.
«Esto no ha terminado»
Pero pese al emotivo entierro, Traspinedo no ha dejado de sufrir. «Esto no ha terminado. No sabemos todavía qué le pasó a Esther y muchos no podemos evitar vivir con miedo», ha señalado una vecina. «Al no tener respuestas y haber varias hipótesis, ya desconfías de todo el mundo», apuntaba otra. «El hermano de mi cuñada me cuenta que va acojonado cuando sale de trabajar a las 6 de la mañana. Mira para todos los lados cuando va por la calle hasta casa», ha explicado.
Y es que el hallazgo del cuerpo sin vida de Esther sin apenas señales violentas ni rasguños tras 25 días a la intemperie y en una zona que ya había sido peinada por las batidas de búsqueda sin haberlo visto con anterioridad les produce muchas sospechas. «Hay muchas contradicciones», expresaba un vecino quien continuaba «pero también es cierto que han sido días de mucho hielo...», argumentaba intentando dar una explicación a lo que la mayoría encuentra como una prueba casi irrefutable de que el cuerpo fue trasladado más tarde.
«Necesitamos que se sepa ya quién ha sido el culpable de esto para que descasemos todos», comenta una señora. «Es que desde que desapareció Esther no hago otra cosa que sentarme en una silla sin saber qué hacer, todo el día viendo las noticias para saber qué ha pasado», relata.
En cuanto a los actuales investigados, Óscar, Carlos y 'El Manitas', ningún vecino quiere apenas dar razón. «Aquí nadie sabe nada. Yo conozco a Carlos y Óscar y no puedo decir nada malo de ellos. De 'El Manitas' no sé nada, no sé quién es».
Lo que sí tienen claro es que si la Guardia Civil esclarece los hechos y se encuentra a un culpable «queremos que lo encierren y tiren la llave para que se quede allí para toda la vida».