Calviño se encara con un diputado del PP que acusa a su marido de trabajar en una empresa que asesora sobre los fondos europeos

Nadia Calviño y el diputado del PP Pablo Hispán han protagonizado un duro cruce de acusaciones durante una comparecencia de ésta en la Comisión de Economía del Congreso.

El popular le ha pedido su dimisión en sus dos turnos de palabra, lo que ha enfadado a la vicepresidenta económica. «Por ineptitud, clientelismo y corrupción en la gestión de los fondos tenga un arranque de dignidad y dimita», le ha solicitado, mientras la presidenta de la Comisión, la diputada socialista Susana Sumelzo, le instaba a terminar porque su tiempo se había acabado. Hispán ha acusado al marido de la vicepresidenta, Ignacio Manrique de Lara, de trabajar en una firma que se dedica, entre otras cosas, a asesorar sobre los fondos europeos.

Le había afeado que el Ejecutivo siga sin aclarar la ejecución real de los Fondos Next Generation, cuánto ha llegado a las familias y las empresas. «No es que no haya transparencia, es que no dan cuentas», ha lamentado. «Todo en usted es fake». «Nos estamos jugando la modernización, la recuperación, el futuro y el empleo de millones de familia», le ha advertido.

Calviño, por su parte, ha exigido al PP: «Cesen en su actitud destructiva, negacionista, en el boicot ante las instituciones europeas. Afortunadamente no dañan la imagen de España, es un país respetado, un país querido, todo el mundo tiene claro que España está liderando el despliegue del plan de recuperación en Europa mano a mano con la Comisión Europea y con el resto de las instituciones europeas y de nuestros socios».

La número dos del Ejecutivo ha acusado a Pablo Casado y los suyos de ser los culpables de que The Economist rebaje la nota de la democracia española por negarse a renovar el Poder Judicial dando entrada a Podemos. «Lo importante es renovar el CGPJ. Su actitud obstruccionista y destructiva está llevando a España a bajar en los ranking internacionales. Dejen las calumnias, mentiras y ataques personales. Es lo contrario del patriotismo», ha espetado a Hispán.

El vaso medio lleno de Calviño

La vicepresidenta económica había empezado presumiendo de que la Comisión Europea haya revisado al alza sus previsiones para España, cuando la realidad es que éstas siguen muy alejadas de los pronósticos optimistas del Ejecutivo: Bruselas habla de un crecimiento del PIB del 5,6% para este año y el Gobierno lo eleva al 7%.

En su exposición inicial, Calviño se ha felicitado de que España ya ha cumplido la mayoría de los 40 hitos y objetivos fijados para solicitar el próximo desembolso de 12.000 millones previsto para el primer semestre de 2022.

Sobre el reparto de las comunidades y ante las reiteradas denuncias de los presidentes regionales y alcaldes del PP en España y también en Bruselas, la vicepresidenta económica ha insistido en que España se ha dotado de un «fuerte sistema de control y auditoría» y que el 97% del dinero se está repartiendo a través de conferencias sectoriales entre los ministerios y las comunidades. Según ella «solo» el 3% de los fondos europeos transferidos a las autonomías no ha sido consensuado.