Partido Popular
Carromero dimite tras la polémica que le sitúa como artífice del espionaje a Ayuso
El alcalde Almeida ha asegurado este jueves que Carromero había negado su vinculación con la investigación a Ayuso
El director general de Coordinación de la Alcaldía de Madrid, Ángel Carromero, ha dimitido este jueves tras la supuesta trama de espionaje a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. Esta ha sido la primera dimisión dentro del Partido Popular.
Carromero ha presentado su renuncia tras las declaraciones del alcalde, José Luis Martínez Almeida, que aseguraba que el asesor había negado su vinculación con lo ocurrido. Sin embargo, tal y como relataba El Debate la formación necesitaba «un cabeza de turco».
«Hoy alguien debe dimitir o debe ser cesado. No sé quién, pero alguien», apuntaba un barón regional a este medio.
Y han pasado únicamente unas horas antes de que Carromero presentase, efectivamente, su dimisión tras una reunión con el alcalde.
Carromero asegura que él no ha tenido nada que ver con lo ocurrido: «Niego rotundamente que haya actuado en nombre del PP ni de nadie, y que haya realizado ninguna de las acciones que se me atribuyen», ha relatado en declaraciones a Efe.
Carromero, el ángel de Casado
Punto final o punto y aparte, este momento marca un hito sin duda significativo en su carrera política, que comenzó muy pronto. Se afiló a los 18 años a Nuevas Generaciones, las juventudes del Partido Popular, organización en la que llegó a ocupar el cargo de vicesecretario general, de 2008 a 2013, cuando Pablo Casado era su presidente. En ese momento se conocieron y desde entonces les une una estrecha amistad.
Más tarde, de 2013 a 2018, Carromero pasó a ser el secretario general de la misma organización juvenil. De forma paralela, desde 2009 hasta el día de hoy, ha ocupado cargos como asesor para de políticos del PP con distintas responsabilidades dentro del ayuntamiento de Madrid. Hablamos, por tanto, de un apparátchik, es decir, de un funcionario profesional a tiempo completo del partido, que combina desde muy joven cargos orgánicos con cargos institucionales.
Vinculado desde su temprana militancia a labores internas dentro de su partido, su nombre saltó a la luz pública en 2012. Mientras se encontraba en Cuba, realizando un viaje de jóvenes del PP para apoyar a la disidencia interna del régimen, Carromero sufrió un accidente de coche cuando él iba al volante. El vehículo se estrelló contra un árbol mientras cruzaban una carretera del este de la isla. Fallecieron dos opositores cubanos, Oswaldo Payá y Harold Cepero, ambos del Movimiento Cristiano Liberación.
Homicidio en Cuba
Los tribunales del país le acusaron de homicidio imprudente, con la consiguiente condena de cuatro años de prisión. Esperanza Aguirre, uno de sus principales apoyos dentro del partido, y en aquel momento presidenta regional de Madrid, denunció la «injusticia cubana» y desde la Comunidad se puso en marcha una campaña de presión política y mediática con el objetivo de que regresase a España cuanto antes. Seis meses más tarde fue expatriado. Al poco tiempo quedó en libertad.
Tras su salida de prisión se reincorporó como asesor al ayuntamiento de Madrid, regido en ese momento por Ana Botella. Ahí se ha mantenido desde entonces, dado que también era cercano a José Luis Martínez-Almeida.
La llegada de Pablo Casado a la presidencia del Partido Popular le sirvió para impulsar su carrera dentro del partido y del consistorio, dado que siempre se ha movido en el ámbito del municipalismo madrileño. En la concejalía de la capital de España ha ocupado la primero la vicesecretaria electoral y luego su actual cargo de director general de coordinación de la alcaldía, del que acaba de dimitir tras la supuesta trama de espionaje.