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Felipe VI recibe el saludo del nuevo presidente chileno, Gabriel Boric, durante su investidura© Casa de S.M. el Rey

Investidura del nuevo presidente chileno

Casa Real desmiente de plano que el Rey llegara tarde a la investidura de Gabriel Boric en Chile

La delegación española siguió religiosamente las indicaciones del protocolo y seguridad chilena el pasado viernes, al igual que el resto de caravanas de los jefes de Estado y de Gobierno

El nuevo presidente de Chile, Gabriel Boric, ha responsabilizado al Rey de España del retraso en el comienzo de la ceremonia de su investidura el pasado viernes en la ciudad de Valparaíso. La Casa del Rey ha desmentido la acusación a este medio: «La delegación española siguió las indicaciones del protocolo y seguridad chilena, que son los que fijan el ritmo de llegada de las caravanas de los jefes de Estado y de Gobierno».

En una entrevista concedida a la televisión chilena 13T el pasado lunes, Boric tildó de «bien inaceptable» el retraso del jefe del Estado español a su investidura.

La ceremonia de juramento comenzó con 15 minutos de retraso sobre la hora inicial prevista. «Me pareció bien inaceptable que se atrasara la ceremonia porque el Rey de España se había atrasado. Pero bueno, son cosas que pasa. Uno tiene que respetar por cierto los protocolos establecidos», afirmó el nuevo líder chileno.

Felipe VI, durante la celebración de la investidura el pasado viernes© Casa de S.M. el Rey

Cambio de trato

Siendo aun presidente electo, el mandatario chileno recibió a Felipe VI a su llegada a Santiago de Chile el pasado jueves. Una reunión a la que también acudieron la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, la ministra de Igualdad, Irene Montero y el presidente del Senado, Ander Gil.

Ya como presidente, Boric invitó al Rey de España a la cena ofrecida en honor de los jefes de Estado y Gobierno que estuvieron presentes en el traspaso del mando presidencial.

Apenas 72 horas más tarde, el chileno decidió arremeter contra el jefe del Estado español y marcar una línea de trato muy diferente a la del anterior presidente del Gobierno, Sebastián Piñera. Fuentes cercanas a Casa Real aseguran que «no se comprende este cambio de trato» pues «la delegación española cumplió el protocolo marcado por las autoridades chilenas».