El Debate, en la marcha en defensa del mundo rural: «Sin el campo, la ciudad no come»
Llegados de toda España Madrid recibe a 400.000 agricultores, ganaderos y cazadores que claman por su supervivencia
El mundo rural se une por vez primera en la Historia del país para exigir un cambio radical a las políticas del Gobierno de Pedro Sánchez
Vox y el sindicato Solidaridad llenaron, el pasado sábado, el corazón de Madrid clamando la bajada del precio de la luz, el gas y los carburantes. Este domingo, el turno fue del campo. Más de 1.500 autobuses trajeron a miles de agricultores, ganaderos y cazadores de toda España para concentrarse en la capital, en defensa del mundo rural. A las asociaciones convocantes hoy sí se unieron PP y Ciudadanos. Vox, repitió. A los miembros del Gobierno Frankenstein ni se les esperaba, ni finalmente estuvieron.
El cielo madrileño dio tregua en una mañana de domingo encapotada. Según la delegación del Gobierno, 100.000 personas se dieron cita en la capital (400.000 para los organizadores). Según varios asistentes preguntados por este medio, eran más de medio millón. La concentración comenzó frente al Ministerio de Agricultura con un ritmo lento que se animó según transcurrió la mañana. Por primera vez en la Historia, agricultores, ganaderos y cazadores se unían contra el Gobierno.
Los manifestantes en la madrileña Plaza de Cibeles este domingo
Poco a poco, los defensores del mundo rural recorrieron los madrileños paseos del Prado y de la Castellana, pasando por las plazas de Neptuno y Cibeles. Especialmente emotiva fue la ovación que un grupo de perros pastores blancos recibieron a su llegada a la Plaza de Colón.
Las demandas del mundo rural
Pedro Barato, presidente de ASAJA, principal organización de agricultores y ganadores del país, solicitó a Sánchez que cese «a los ministros que atacan a la agricultura, a la ganadería, a los toros y al mundo rural en general».
En este mismo sentido, Miguel Padilla, secretario general de COAG, la primera organización profesional agraria de ámbito estatal en España, fue claro: «Pedimos apoyo para los 47 millones de españoles, igual que lo hicimos durante la pandemia, porque llenamos los pueblos vacíos».
Para no tener que «malvender» sus tierras, Padilla exigió al Gobierno que corrija o intervenga el precio de la energía, los combustibles y las materias primas. También, que las explotaciones sean viables, se flexibilice la Política Agraria Común (PAC) para que se puedan cultivar las millones de hectáreas que hay en España, y que se ataje la especulación".
Ángel Villafranca, presidente de Cooperativas Agro-alimentarias de España subió los decibelios: «No podemos tener una PAC verde en número rojos». No se van a «deslocalizar», y puso negro sobre blanco: El campo necesita «herramientas continuar alimentando a la población».
Ambiente en la manifestación contra el abandono rural del Gobierno
En este mismo sentido, representantes regionales agrícolas y ganaderos indicaron a El Debate que si el Gobierno no hace nada por ayudarles, existe riesgo de llegar al desabastecimiento. También, de agravamiento de la despoblación de la denominada 'España vaciada'.
Apoyo del centroderecha
Tan sólo el Partido Popular, Vox y Ciudadanos se sumaron a la concentración. Justo antes del comienzo de la marcha por las arterias de la capital, fueron varios los políticos que ofrecieron canutazos a los medios presentes.
Cuca Gamarra, junto a Esteban González Pons y otros políticos del PP, este domingo en la manifestación por la defensa del campo celebrada en Madrid
La portavoz del PP en el Congreso, Cuca Gamarra, exigió al Ejecutivo «que no criminalice a los que salen a defender sus derechos por las calles españolas», pues son «la España real», «a la que el agua le llega al cuello y no es capaz de llegar a fin de mes». Su compañero de partido y presidente murciano, Fernando López Miras, agregó: «Ahora más que nunca es importantísimo que seamos autosuficientes».
En un tono más exaltado se expresó el diputado de Ciudadanos en el Congreso. Edmundo Bal subrayó que «la paciencia» de los que hoy se han manifestado «se va a acabar» y pidió «soluciones inmediatas» al Gobierno.
Santiago Abascal también se manifestó ayer en Madrid en contra de la subida de la luz, el gas y los carburantes
Entre gritos de «¡presidente!» y «¡Gobierno, dimisión!», Santiago Abascal reiteró la reclama que su partido y el sindicato Solidaridad pidió ayer en Cibeles: «Nuestra manera de vivir ha sido criminalizada por poderes públicos e ideologías, como la religión climática, que han puesto a la borde de la ruina a muchos de nuestros compatriotas».
Según el líder de Vox, existen «impuestos abusivos y un exceso de reglamentación».
El Gobierno, en silencio
Ningún miembro del Gobierno de coalición se presentó en el multitudinario encuentro. El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, se limitó a publicar en su Twitter una entrevista concedida a 'La Besana en Verde'.
El ministro afirmó en el programa de la televisión pública extremeña que «hay que pasar de una lógica de protestas» a una «de futuro». Con una visión optimista, Planas aseveró que el sector puede mejorar mucho si se trabaja bien.
Final de la manifestación, las asociaciones convocantes aplauden
La marcha de la capital concluyó frente al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. En la Fuente de San Juan de la Cruz, con bocatas de chorizo y botas de vino en mano, los congregados dieron una especial ovación a los agricultores de La Palma, quienes todavía no han recibido las ayudas. También a los transportistas que se prestaron a llevar los productos por toda la geografía española durante la pandemia. El mundo rural se ha unido así en la capital para hacer frente a su desaparición y al desabastecimiento del país. También, para pedir la dimisión de Pedro Sánchez.
