El Gobierno advierte a Mañueco de que vigilará de cerca su pacto con Vox

El Gobierno ha avisado a Alfonso Fernández Mañueco por segunda vez en dos meses de que estará «atento y vigilante» a sus movimientos, una vez investido presidente de la Junta de Castilla y León.

La portavoz del Ejecutivo ha lamentado este martes que el PP haya «abrazado los planteamientos de la ultraderecha», en alusión a su pacto con Vox, y le ha pedido que recapacite y ponga un «cordón democrático» a la formación de Santiago Abascal como en Francia a Marine Le Pen.

Isabel Rodríguez ha preguntado a Alberto Núñez Feijóo «de qué lado está» y ha insistido en que el Ejecutivo central no quitará el ojo de encima al nuevo Gobierno de coalición conformado en Castilla y León para que respete los derechos de las mujeres y los niños.

A su lado, la ministra de Justicia, Pilar Llop, se ha referido expresamente al pacto entre Mañueco y Vox para aprobar una Ley de Violencia Intrafamiliar que no sustituirá a la Ley contra la Violencia de Género en vigor, sino que según el presidente castellano y leonés será «complementaria».

«Realmente es muy grave pactar con una fuerza política que niega una cuestión de Estado. Desde que existen registros ha habido más de mil mujeres asesinadas por el machismo», ha afirmado Llop.

Es la segunda vez que la portavoz del Gobierno avisa a Mañueco de que está bajo la lupa de La Moncloa desde la mesa del Consejo de Ministros. Ya lo hizo en febrero de manera preventiva, cuando el PP y Vox aún no habían cerrado su acuerdo siquiera.

Sotto voce, desde el Gobierno van adelantando algunas de las armas de las que disponen si Vox despliega sus políticas en Castilla y León. Que pasan, básicamente, por acudir a los tribunales mediante la Abogacía del Estado.

Fuentes gubernamentales recuerdan que, en Murcia, el Ministerio de Educación recurrió por la vía contencioso-administrativa el pin parental ante el Tribunal Superior de Justicia de Murcia. «Haremos eso y todo lo que esté en nuestra mano», advierten. En ese «todo» apuntan también al Tribunal Constitucional.

Por lo que se refiere a la Ley de Violencia Intrafamiliar, fuentes gubernamentales aseguran que el hecho de que vaya a convivir con la Ley contra la Violencia de Género y no a sustituirla no es ninguna tranquilidad.

Afirman, por el contrario, que estarán atentos a ver cuántos recursos económicos y humanos destina Mañueco a una y otra. Porque, según sus estadísticas, las denuncias por violencia machista son ocho veces más que las denuncias por violencia intrafamiliar.