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El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, durante su participación esta viernes en la tercera y última jornada de la Reunión del Cercle EconomíaEFE/ Andreu Dalmau

Feijóo se presenta como garante de la «estabilidad» frente a la política de «las trincheras»

Durante su intervención en las jornadas del Cercle de Economía ha asegurado que el proceso independentista ha traído «decadencia» para Cataluña y que intentará «revertir» esta situación

El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, se ha estrenado en las jornadas del Cercle de Economia, defendiendo el estado de las autonomías y presentándose como garante de la estabilidad. Además, ante el empresariado catalán, ha desgranado su propuesta económica, que pasa por una racionalización del gasto superfluo, bajar el IVA el 5% de la energía eléctrica y el gas, actuar sobre el impuesto de sociedades o rediseñar la gestión de los fondos europeos.

«La España de la autonomías es un feliz encuentro de ideas, experiencias y aspiraciones que fraguaron en una fórmula que en mi opinión es plenamente vigente». Es la idea con la que ha arrancado su intervención Núñez Feijóo, quien también ha añadido que la identidad política, lingüística o cultural de estos territorios no es «caprichosa», sino que responde a la «necesidad de preservar una herencia con el que contribuimos a enriquecer el enervo común. No entiendo la identidad como forma de rebeldía arbitraria, sino forma de reafirmar lo que cada uno es».

A partir de ahí, ha cargado contra el proceso independentista que ha sido un «un pésimo negocio» porque ha dividido a la sociedad, ha deteriorado las instituciones y se ha dejado de gobernar «en función de los intereses de los ciudadanos para mantener un objetivo imposible que sólo genera parálisis y frustración». Y todo ello, a su juicio, ha provocado la pérdida de prestigio y la capacidad de atracción de Cataluña, y en definitiva, que caiga «en decadencia» . Pero el líder del PP apuesta por «revertir esta situación» porque «Cataluña no puede quedarse atrás».

Y todo ello pasa por «hablar menos de política, y más de economía; menos de desconectar y más de reconectarse al progreso». Pero también advertía ante los asistentes a la conferencia, que Cataluña debe recuperar su papel de liderazgo porque ir solos, añadía, «es un callejón sin salida».

Alberto Núñez Feijoo también se ha presentado ante el empresariado catalán como el garante de la estabilidad frente a la política del «conflicto y de la trinchera» que ha reinado en los últimos años, y que incluso se percibe en el seno del propio Gobierno. «Su división interna me parece lamentable», según el líder del PP, quien ha puesto como ejemplo «lo que ha pasado en política nacional esta semana, que ha afectado a la política catalana, es la antipolítica», en referencia a las consecuencias sobre el espionaje al presidente del Gobierno y otros miembros del ejecutivo.

Y ha dejado claro que «la economía y la política con dos caras de un deseo que compartimos: la estabilidad; y ahora tenemos inestabilidad política e inestabilidad económica cada vez con mayor virulencia “. En este aspecto ha lamentado que el PSOE haya dado la espalda a la posibilidad de llegar a “consensos amplios» como en el ámbito económico al rechazar la propuesta del PP, que «hubiera implantado en caso de gobernar».

Propuesta que contempla, entre otras cuestiones, «racionalizar el gasto público» porque es «casi una gestión de pudor reducir el gasto superfluo para que los ciudadanos no se sientan insultados»; pero también contempla ajustar la tarifa del impuesto sobre la renta; bajar el IVA un 5% en la energía eléctrica y el gas; una mejor redistribución de los fondos europeos y abordar reformar estructurales para activar la economía.

Por otro lado, y preguntado por una futura alianza con VOX, Núñez Feijóo dice que PP y VOX coinciden en una cuestión: «en hablar siempre del PP», unos para defenderlo y otros para criticarlo. Y ha defendido la centralidad del Partido Popular, que es una formación «europeísta, autonomista y de gestores».