El juez Calama levanta el secreto de las investigaciones sobre el caso Pegasus y cita como testigo al ministro Bolaños

El juez de la Audiencia Nacional José Luis Calama ha levantado el secreto de sumario que, el pasado día cinco de mayo, decretó por un mes en la causa abierta por el presunto espionaje al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a la ministra de Defensa, Margarita Robles, y al ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, a través de una infectación de sus teléfonos móviles con el softaware de origen israelí Pegasus. Así lo ha decidido el titular del Juzgado de Instrucción Central Número 4 tras blindas durante treinta días las actuaciones seguidas en el marco de un procedimiento en el que ofreció a los afectados personarse como perjudicados, según han confirmado a El Debate fuentes judiciales. Además, el magistrado ha ordenado la comparecencia del ministro de Presidencia, Félix Bolaños, para que preste declaración en calidad de testigo y aporte la información de que disponga sobre lo ocurrido, el próximo día 5 de julio a las 09.00 horas.

Calama ha tratado «prevenir una situación que pueda comprometer de forma grave el resultado de la investigación» que pudiese impedir «el conocimiento del resultado de las diligencias a acordar» dado lugar a «interferencias o manipulaciones dirigidas a obstaculizar la investigación y frustrar sus objetivos». Y lo ha hecho tras librar una comisión rogatoria a la empresa fabricante del programa de espionaje NSO Group que, según ha podido conocer El Debate, hasta la fecha no ha aportado datos relevantes acerca de la autoría de los hechos.

El juez ponía manos a la obra para tramitar la causa con la mayor agilidad y, en su auto inicial, ha centraba las fechas en las que se produjo el presunto delito de revelación de secretos sobre los miembros del Gobierno: el móvil de Sánchez resultó infectado el 19 y el 31 de mayo de 2021, mientras que el de la ministra de Defensa lo fue en junio de ese mismo año.

El escándalo saltaba cuando el ministro de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Félix Bolaños, anunciaba en una rueda de prensa convocada junto a la ministra Portavoz, Isabel Rodríguez, que el teléfono del jefe del Ejecutivo y el de la titular de Defensa habían infectados con el malware. De ahí que, el juez Calama haya determinado la relevancia de que Bolaños comparezca en la Audiencia Nacional para declarar como fuente directa conocedora de los detalle y la cronología del supuesto delito.

Según ha podido saber El Debate, el pasado viernes el instructor recabó el testimonio, también como testigos, de la exdirectora del CNI Paz Esteban y de un funcionario de la Inteligencia española que habría sido el encargado de confeccionar los informes confidenciales sobre este asunto. Las mismas fuentes consultadas han apuntado a que el juez Calama no descarta volver a declarar secretas la actuaciones si, llegado el caso, las pesquisas así lo requieren.