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El ministro de Asuntos Exteriores de España, José Manuel Albares, hoy en BruselasEFE

Albares reprocha a la oposición que pida explicaciones a Sánchez por su error diplomático con Marruecos

El ministro ha señalado que el Gobierno quiere volver al diálogo con Argelia «lo antes posible»

El ministro de Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ha criticado a la oposición lo que calificado de «deslealtad» e «irresponsabilidad», al referirse a la petición por parte del PP de la comparecencia del presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, a raíz del anuncio de Argelia de suspender el tratado de amista con España por su «injustificable» posición respecto al Sáhara Occidental.

Así lo ha expresado en la comparecencia de esta tarde tras la reunión con el vicepresidente de la Comisión responsable de la política comercial de la UE, Valdis Dombrovskis en Bruselas, y con otros miembros del servicio exterior, una reunión en la que han constado, ha dicho el ministro, «el rechazo de la UE, de la comisión, de las instituciones europeas a esta medida unilateral de Argelia».

Albares ha sostenido que «el Gobierno de España no ha tomado ni una sola decisión que afecte a Argelia y ni una sola decisión, ni una sola palabra para producir ninguna escalada». Y ha hecho hincapié en que quieren mantener con Argelia «la misma relación que con todos nuestros vecinos».

Sobre esta decisión tomada por el país norteafricano este miércoles, ha apuntado que «viola el acuerdo de asociación» entre la UE y Argelia, y, en este sentido, «afecta al mercado único, a las relaciones comerciales y económicas de Argelia».

El titular de Exteriores ha señalado, asimismo, que el Gobierno de España quiere volver al diálogo con Argelia «lo antes posible», así como «a la amistad» que tienen ambos pueblos, y a las relaciones comerciales y económicas «normales» entre ambos Estados y entre la UE y el país vecino.

«El Gobierno de España lo que desea es tener exactamente las mismas relaciones con Argelia que con todos sus vecinos», ha expresado, una relaciones basadas «en la amistad, en el respeto mutuo, en la igualdad soberana de los Estados, en la no injerencia en los asuntos internos», ha sostenido el ministro desde Bruselas.

Se ha pronunciado en la misma línea en la que lo ha hecho esta mañana la portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez, que ha confiado en que se puedan «reconducir las relaciones».