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El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, en uno de sus últimos actosEFE

Justicia

El PP se abre a pactar sobre el CGPJ si el Gobierno retira la reforma para controlar el Constitucional

El Partido Popular ha realizado una propuesta para reforzar la independencia judicial en la que quiere modificar grandes aspectos sobre los órganos constitucionales

El Partido Popular ha movido ficha para frustrar el intendo del Gobierno por controlar la renovación del Tribunal Constitucional. A la espera de la deliberación del Pleno Extraordinario del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), convocada a instancias de nueve miembros del órgano críticos con la maniobra de Pedro Sánchez, el PP ha subido la apuesta y se ha mostrado dispuesto a desatascar las cosas siempre y cuando los socialistas retiren del Congreso su polémica propuesta para modificar de nuevo, la Ley Orgánica del Poder Judicial (LOPD). Desde que Núñez Feijóo llegase a la sede de Génova 13, los populares siempre se han mostrado favorables a la necesidad de reformar las instituciones que dependen del Poder Judicial, y el documento publicado hoy, tras la reunión del Comité Ejecutivo Nacional, ha llegado como una clara declaración de intenciones.

En el PP consideran que la situación del órgano de gobierno de los jueces es insostenible -ya que llevan con su mandato prorrogado desde finales de 2018- y, por ello, quieren que el CGPJ se renueve con el actual mecanismo, para que posteriormente se logre un modelo de consenso en el que se «despolitice» la Justicia. Así lo ha trasladado formalmente la formación de Núñez Feijoo, este lunes, al Gobierno en una propuesta que ha sido anunciada en rueda de prensa por el vicesecretario de Institucional, Esteban González Pons. quien ha asegurado que tras tres años caducado, acceder a un nuevo intercambio de cromos, para reemplazar a los actuales vocales del CGPJ con un «pacto secreto» dejaría «todavía más cuestionada» la ya maltrecha independencia judicial en España.

Además, y al hilo de las constantes polémicas en el seno de la Fiscalía General del Estado, el PP ha incluido una moción para que el titular del Ministerio Público no pueda proceder el ejercicio de la política activa en los cinco años inmediatamente anteriores a su elección para el cargo. Se trata de esquivar nuevos escándalos como los que se están viviendo en el seno de la Fiscalía desde la llegada de Dolores Delgado procedente de la cartera de Justicia.

La presión del Gobierno al PP

Para presionar al PP, el Ejecutivo de Pedro Sánchez llevó a cabo en abril una reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial (LOPJ) que impedía al CGPJ realizar nombramientos discrecionales cuando estuviera en funciones, lo que ha asfixiado al Tribunal Supremo por su falta de cargos. Sin embargo, como en junio se expiró el mandato de cuatro de los magistrados del Órgano de Garantías -que dos de ellos los tiene que renovar el CGPJ y los otros dos el Gobierno- el PSOE aspira aprobar una reforma de su propia modificación que permita al CGPJ nombrar exclusivamente a los magistrados del TC, y así controlar este órgano.

El PP se ha mostrado abiertamente contrario a este nuevo ejercicio de injerencia del Ejecutivo en la Justicia por lo que, aprovechando el tirón del propio CGPJ reunido en Pleno en las próximas horas, que mira a Europa de reojo, ha pedido que se derogue íntegramente la reforma que impide al CGPJ hacer nombramientos cuando está en funciones, y no sólo en lo que respecta al TC. No habrá, por lo tanto, y como ya adelantó El Debate, cheque en blanco de los populares a las intenciones del PSOE.

Propuestas del PP

1. La renovación del CGPJ debe hacerse con absoluta transparencia y por los órganos constitucionales a los que corresponde: el Congreso y el Senado. En consecuencia, el liderazgo de este proceso debe otorgarse a las Cortes.

2. La reforma que impide al CGPJ hacer nombramientos cuando está en funciones debe derogarse íntegramente y no solo en lo que respecta al TC.

3. La próxima renovación tendrá presente la necesaria regeneración. Se preferirán los perfiles de mayor prestigio y los menos vinculados a partidos políticos, respetándose los turnos establecidos en la Constitución: doce vocales procedentes de la carrera judicial y ocho vocales juristas, sin que quepa introducir por este último cupo a integrantes de la carrera judicial en ejercicio. Así mismo, en su elección ya se obrará de acuerdo con los principios de la reforma legal referida en el siguiente punto.

4. En paralelo a la renovación se tramitará una reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial que asegure un cambio del modelo de elección del CGPJ de consenso, que impida que la presente situación de deterioro vuelva a producirse y que logre despolitizar el gobierno de la Justicia. Se encargará una propuesta de reforma al nuevo CGPJ y en el Congreso de los Diputados se creará una ponencia, en el seno de la Comisión de Justicia, que emitirá un informe al respecto, ambos en un plazo improrrogable de seis meses.

5. Los vocales que resulten elegidos deberán responder al espíritu de regeneración democrática y reforma que inspira el presente compromiso.

6. Este pacto estará abierto al resto de fuerzas parlamentarias.

7. A este acuerdo le seguirá un proceso de diálogo estructurado para alcanzar un Plan de Reconstrucción Institucional, que garantice la independencia y mejore el prestigio de todas las instituciones del Estado.