El PSOE impulsa una tasa al turismo en Sevilla

El alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz, defenderá en el próximo pleno del Ayuntamiento hispalense una iniciativa que reivindica desde su etapa como delegado de Turismo en el Gobierno municipal de Juan Espadas. Se trata de la tasa turística, un impuesto a los viajeros que se hospeden en los hoteles o alojamientos sucedáneos de una determinada ciudad.

No obstante, la propuesta está subordinada a un marco legislativo superior, ya sea autonómico o nacional, puesto que los ayuntamientos no tienen competencias para promulgar la medida. Por tanto, en ella se recoge la solicitud para que la Junta de Andalucía o el Gobierno de España desarrollen una legislación que permita implantar la tasa, con el objetivo, en teoría, de reinvertir el dinero recaudado en la conservación del patrimonio cultural de la ciudad y en la promoción turística.

El PSOE de Sevilla registraba este lunes la iniciativa, que en el Partido Popular también ven con buenos ojos, aunque ponen condiciones. El candidato del PP a la Alcaldía, José Luis Sanz, se muestra a favor del cobro de una tasa turística «siempre que el sector esté a favor, haya consenso en la gestión y la recaudación revierta en el turismo de la ciudad»; requisitos que pide valorar.

«Es prioritario que se abra una vía de diálogo con los hoteleros y el resto de los sectores implicados y que ellos indiquen si es beneficioso aplicar una tasa turística o no. En el caso de que estén a favor, habría que consensuar la cantidad a cobrar con ellos y analizar la fórmula de recaudación», ha advertido Sanz.

Este gravamen, que se aplicaría en las 68.000 plazas hoteleras que hay en Sevilla, podría dejar hasta siete millones de euros al año en la ciudad, según cálculos del propio Consistorio hispalense, en el supuesto de que el turista pague un euro por pernoctación, como en Lisboa, el modelo de estudio.

Tras los pasos de Málaga

Sevilla sigue los pasos de Málaga, donde hace un par de semanas se aprobó por unanimidad una moción con la que la corporación municipal urge a la Junta de Andalucía y al Gobierno de España a establecer un marco normativo que posibilite la implementación de una tasa turística en la capital malagueña. Una de las vías que se admitieron, remitida al Ejecutivo nacional, es la reforma de la Ley Reguladora de las Haciendas Locales.

«Siempre hemos defendido la aplicación de una tasa o un instrumento de fiscalidad turística en Sevilla. Pero como Ayuntamiento no tenemos competencias. Ahora queremos seguir el modelo de otras grandes ciudades que han implantado esta tasa, que no ha supuesto en ningún caso una reducción de visitantes, ni ha afectado negativamente al sector turístico. Todo lo contrario, ha permitido generar recursos económicos para inversiones y mejora de servicios públicos», ha afirmado Antonio Muñoz.

El alcalde de Málaga, Paco de la Torre, cambió la posición que hasta entonces había mantenido su partido, el PP, en relación con este tipo de tributos. Desde las filas populares se ha sostenido reiteradamente que una tasa turística es una medida impositiva que ahuyenta a los visitantes, que ya pagan en ciudades como Lisboa, París, Berlín o la Barcelona de Ada Colau (de hasta 3,5 euros por persona y noche en hoteles de cinco estrellas).

La indefinición de la Junta

En este sentido, el aún portavoz de la Junta, Elías Bendodo, manifestaba tras la reunión del Consejo de Gobierno, que la valoración de la tasa turística será «una de las primeras cuestiones que tendrá que abordar el nuevo consejero de Turismo». Lo que ahora es indefinición al respecto antes era, en cambio, oposición.

En enero, el entonces viceconsejero de Turismo, hoy titular de Educación y Deporte en funciones, Manuel Alejandro Cardenete, de Ciudadanos, rechazaba la idea: «No está ni en el debate, y menos en año electoral». Sin embargo, el escenario ha cambiado. De hecho, desde entonces, se han dado pasos en el gravamen del turismo.

Regulación de los pisos turísticos

En Sevilla, desde el pasado 7 de junio, ya están regulados los pisos turísticos. El cambio normativo surgido del Pleno del Consistorio hispalense obliga a esta clase de alojamientos a someterse a las mismas obligaciones legales que hoteles, hostales, pensiones y apartamentos turísticos. Actualmente, en la capital andaluza hay alrededor de 7.300 pisos turísticos, con una capacidad total para hospedar a unas 35.600 personas, según datos del Registro de Turismo de Andalucía.

Por tanto, la tasa turística supone sólo un paso más en el gravamen del turismo en Sevilla. Así se pretende «mitigar alguno de los efectos negativos que tiene el turismo», como reconoció hace ya dos meses Antonio Muñoz, quien persigue una vieja aspiración que ahora vende, en positivo, como medida para llevar a cabo inversiones y mejorar los servicios públicos.