Los caídos del presidente: ¿quiénes quedan de la foto de la primera victoria electoral de Sánchez?

La dimisión de Adriana Lastra como número dos PSOE ha provocado que, desde que Pedro Sánchez lograra su primera victoria electoral, muchos de los políticos cercanos al líder socialista han desaparecido de su núcleo duro. En la foto de celebración de las elecciones generales del 28-A –hace apenas tres años– aparecen José Luis Ábalos, Carmen Calvo, Adriana Lastra y Cristina Narbona. Tres de los cuatro políticos que acompañaron a Sánchez, al menos, desde que se presentara como candidato a secretario general del partido en 2017, ya no son de su máxima confianza.

José Luis Ábalos fue uno de los principales valedores de Sánchez cuando aspiró a liderar el PSOE por primera vez en 2014. Ábalos provenía de la Comunidad Valencia, y apostó por la candidatura del entonces desconocido político madrileño ante el candidato que entonces representaba una posición más 'progresista', Eduardo Madina. De esta etapa también proviene el apoyo de Adriana Lastra, que hizo campaña con Sánchez en un modesto Peugeot 407. Para esa primera victoria de Sánchez dentro del partido fue fundamental el apoyo de la entonces baronesa andaluza Susana Díaz, la que sería su rival solo tres años después.

Las primarias de 2017: Calvo se apunta

La primera etapa de Pedro Sánchez como secretario general del PSOE finalizó a finales de 2016 de manera convulsa. Su constante negativa a abstenerse al Gobierno de Mariano Rajoy –y evitar de esta manera una tercera convocatoria electoral– provocó que dimitieran 17 miembros de su Ejecutiva, los llamados «susanistas» o «críticos», y entre los que se encontraban Ximo Puig o Emiliano García-Page. El PSOE acabó permitiendo el Gobierno de Rajoy, pero Sánchez no se dio por vencido y se volvió a presentar a las primarias de 2017.

La nueva convocatoria para optar al liderazgo del PSOE nacional enfrentó a Susana Díaz contra Pedro Sánchez. En este caso, casi todos los que habían sido líderes del partido –como Felipe González, Alfonso Guerra o el propio José Luis Rodríguez Zapatero– apoyaron a la andaluza. Sin embargo, Sánchez consiguió fichar para su equipo de primarias a dos exministras históricas, Carmen Calvo y Cristina Narbona, que se unían a su núcleo duro junto a Lastra y Ábalos. Los militantes socialistas apostaron por la candidatura de Pedro Sánchez, que se convirtió por segunda vez en secretario general del PSOE.

Caen Ábalos y Lastra

Tras la segunda llegada de Sánchez a la secretaría general, Lastra fue nombrada vicesecretaria y Narbona presidenta del PSOE. Por su parte, tanto José Luis Ábalos como Carmen Calvo formaron parte del primer gabinete unicolor de Sánchez tras la moción de censura de junio de 2018. Cuando el líder socialista decidió adelantar la convocatoria electoral a abril de 2019 –ante la falta de apoyos en el Congreso– Calvo, Lastra, Ábalos y Narbona salieron al balcón de Ferraz a celebrar la primera victoria electoral de Sánchez, al que también acompañaba su mujer, Begoña Gómez.

Calvo y Ábalos también estuvieron en el segundo Gobierno de Sánchez, pero acabaron cayendo en la primera gran remodelación del presidente. A mediados de julio del año pasado, y de manera inesperada, dejaron de ser ministros Carmen Calvo y José Luis Ábalos, abandonando el núcleo duro de Sánchez junto a su entonces director de Gabinete y gurú político, Iván Redondo. Ambos se mantuvieron como diputados del grupo socialista en el Congreso, pero ya lejos de la primera línea política.

La dimisión de Lastra

Ahora, la reciente dimisión de Adriana Lastra como vicesecretaria del PSOE ha hecho que Sánchez se quede casi sin ninguna de las personas que le permitieron acceder a la presidencia del Gobierno. De su primera etapa como secretario general, ya no están ni Lastra ni Ábalos. Por su parte, de las dirigentes históricas que le apoyaron contra Susana Díaz, solo queda Cristina Narbona, presidenta del PSOE.