Olona inicia el Camino rodeada de seguidores y alejada de los diagnósticos médicos más pesimistas

Hace una semana, el pasado 22 de agosto, Macarena Olona sorprendía a sus seguidores en redes sociales anunciando que iniciaría el Camino de Santiago y animando a acompañarla a todo aquel que quisiera hacerlo, ofreciéndose incluso a hacerse cargo de los gastos del que quisieran ir con ella pero no pudieran por cuestiones económicas. Ponía punto de encuentro, fecha y hora. Partirían desde Sarria (Lugo), a las 7:30 de este lunes, 29 de agosto, exactamente un mes después de que comunicara que dejaba la política por motivos de salud.

Precisamente sobre esta cuestión se ha pronunciado al comienzo de su intervención ante los medios desde el municipio lucense. «Quiero compartir que afortunadamente los peores diagnósticos posibles que se valoraban en aquel momento inicial han sido descartados por completo», ha señalado, explicando que se debe a un problema de tiroides que puede controlarse con medicación.

En estas mismas declaraciones, Olona ha mandado un mensaje de agradecimiento y de perdón a Andalucía, señalando que es uno de los «pesos» que lleva consigo en este camino. «Ojalá mi proyecto vital y profesional que pasaba por Andalucía no hubiese tenido que verse interrumpido de la manera tan abrupta como tuve que hacerlo», ha lamentado. La exdiputada de Vox ha confesado no saber qué le deparará el final del camino, pero ha asegurado que debe mucho a la región y que va a entregarse «cada vez que pueda», al mismo tiempo que ha afirmado que «el proyecto continúa», refiriéndose al partido que hasta hace un mes lideraba en la región.

Su salida repentina y el silencio de Vox durante estas semanas han dado lugar a todo tipo de especulaciones relativas a su relación con la cúpula de la formación de Santiago Abascal. Sin embargo, la exparlamentaria ha negado las informaciones «que puedan suponer cualquier tipo de daño hacia Santiago», asegurando que hacia él «solo tengo palabras de profundo agradecimiento y un inmenso cariño».

Familia política

Macarena Olona se siente querida. Así lo ha expresado en varias ocasiones y así se ha podido ver durante esta primera jornada del Camino de Santiago, a la que han acudido para acompañarla en torno a un centenar de personas. «Lo que yo he encontrado a lo largo de estos tres años ha sido una familia. Cuando me encuentro con personas anónimas por la calle que me paran, me saludan y me abrazan…soy su Macarena. Es lo que yo siento. Sin pedir permiso me he metido en sus hogares», ha dicho la expolítica.

Durante estos primeros 22 kilómetros que separan Sarria de la segunda parada, Portomarín, Olona se ha mostrado cercana con todos los caminantes, conversando con todo aquel que se le iba acercando y deseando buen camino a aquellos que pasaban, siendo, como ella misma ha dicho, «una peregrina más», que decidió emprender este camino estando postrada ante el apóstol Santiago en Panamá.

Preguntada por este medio sobre el porqué de hacer pública esta experiencia e invitar a sus seguidores a realizarla junto a ella, ha remarcado su intención de «dar las gracias y de devolver un mínimo todo lo que me han dado los españoles, especialmente en esta última etapa». «Tuve claro que el Santo Apóstol me enviaba a Santiago y que tenía que hacer el Camino, un camino de profundo agradecimiento para cumplir una promesa», ha explicado, trasladando su intención de que esta experiencia sea «un acto de recogimiento y de fe».