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Santiago Abascal, en el CongresoEFE

Recuperar la soberanía, explotar los propios recursos y otras claves de la propuesta de Vox en materia de energía

La formación de Abascal ha registrado en el Congreso una Proposición de Ley para modificar la Ley de cambio climático aprobada en 2021

«españa debe proteger sus intereses nacionales y su soberanía energética. Una energía barata, sostenible, eficiente y limpia que asegure unos precios de la luz asequibles para las familias y empresas españolas es la base para la reindustrialización». Así lo recogía Vox en su programa político Agenda España que presentaba hace casi un año, en la misma línea en la que lo expresaba también en 2018 entre las '100 medidas urgentes para España'. Sobre esta misma base se apoya la alternativa que propone el partido en materia de energía y que recoge en la Proposición de Ley que ha registrado su grupo parlamentario esta semana en el Congreso.

Con tal propuesta, la formación que preside Santiago Abascal busca «revertir los perniciosos efectos» de la ley de cambio climático–la Ley 7/2021, de 20 de mayo, de cambio climático y transición energética–, y en este sentido, propone derogar las disposiciones de la norma que impiden la exploración y la explotación los recursos energéticos de España. También «iniciar la senda de la recuperación» enmarcada en «la búsqueda de la soberanía energética, la protección del ser humano, del medio ambiente y del sector primario».

La formación reprocha a los líderes políticos y empresariales de los países occidentales que hayan alentado en los últimos años «la puesta en marcha de políticas de deliberado decrecimiento y de reversión del progreso» basándose en la lucha contra el cambio climático que estaría provocando la acción humana. En este sentido, denuncia que, pese a que las emisiones que genera España no representan ni el 0,8 % de las globales, se han firmado tratados internacionales, y se han impuesto elementos como las tasas verdes o trabas burocráticas que han llevado a un encarecimiento «de forma ficticia» del precio final de la energía.

Mientras, remarcan los de Abascal, países como China, Estados Unidos o la India son en conjunto responsables de más del 50 % de la contaminación mundial y no impulsan políticas para reducir tales emisiones, e incluso, «proveen a Europa de los bienes y servicios que esta, paradójicamente, rechaza producir», resaltan en la exposición de motivos de su propuesta. Asimismo, critican que las políticas climáticas impuestas se basan en estudios científicos que únicamente analizaban «los aspectos negativos futuros del cambio climático» y cuyas previsiones tendían mayoritariamente al «catastrofismo».

Las modificaciones que pide Vox

El pasado 13 de mayo de 2021, el Congreso aprobaba la Ley de Cambio Climático y Transición Energética con el apoyo de todas las fuerzas políticas, la abstención del Partido Popular y Más País y el voto en contra de Vox. Se trata de una ley que llega seis años después de la firma del Acuerdo de París, que, entre otras cosas, plantea reducir de forma significativa las emisiones de gases de efecto invernadero, y «pone en el centro de la acción política la lucha contra el cambio climático y la transición energética, como vector clave de la economía y la sociedad para construir el futuro y generar nuevas oportunidades socioeconómicas», según se expone en el preámbulo.

Los de Abascal consideran que los resultados de aplicar esta norma son «nefastos», y dada la crisis actual en materia energética, ven urgente adoptar una serie de medidas para superarla y modificar determinados puntos, así como «suprimir los elementos más perjudiciales» de la misma. Así, y bajo la premisa de potenciar la soberanía energética de España, Vox pide que en la ley rijan los principios de garantía de la prosperidad de los españoles y del interés nacional, así como el rigor científico o la protección del medio rural, entre otros, frente a los principios rectores que responden a «criterios netamente ideológicos».

También, solicita supeditar la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y de energías renovables a «asegurar la soberanía energética». Y, por otro lado, propone modificar los artículos 9, 10, 11 y 29 para eliminar las disposiciones que prohíben la exploración y la explotación de hidrocarburos y yacimientos de minerales radioactivos, o actividades como el fracking.

Esta Proposición de Ley de modificación de la actual Ley de cambio climático vigente se suma a las iniciativas que Vox ha presentado desde octubre de 2018, cuando propuso en esta materia desarrollar un Plan de Energía para «conseguir la autosuficiencia energética de España sobre las bases de una energía barata, sostenible, eficiente y limpia».