Ministerio Público
García Ortiz afronta su primer Consejo Fiscal con «algunas cuestiones» de la era Delgado por aclarar
El nuevo fiscal general del Estado presidirá, por primera vez, el Pleno de un órgano colegiado que se ha mostrado muy hostil con la gestión de su predecesora
La cita del nuevo fiscal general Álvaro García Ortiz con el máximo órgano colegiado de la Carrera, el Consejo Fiscal, tendrá lugar este próximo miércoles. El 14 de septiembre, los miembros electos de la institución – tremendamente críticos con la gestión de su predecesora en el cargo, Dolores Delgado– han sido convocados por el nuevo titular del Ministerio Público para tratar, entre otras cuestiones todos los «flecos» pendientes de explicar sobre las decisiones más polémicas de una FGE en las que él mismo ocupaba la Secretaría Técnica.
Es decir, la herencia envenenada de la era Delgado pasa, en buena medida, por las actuaciones del propio García Ortiz que podría haberse «extralimitado» en el ejercicio de sus competencias. Las maniobras del caso Stampa; el polémico renombramiento del candidato a la Unidad de Menores, desoyendo al propio Tribunal Supremo; el cambio de criterio de la Fiscalía en la causa de la Audiencia Nacional contra los cerebros de ETA que, presuntamente, ordenaron el secuestro y asesinato del concejal vasco Miguel Ángel Blanco,... impedirán a García Ortiz que su estreno interno sea un mero trámite.
Consciente del malestar del conjunto de los fiscales, democráticamente representados por sus consejeros elegidos en urnas, García Ortiz ha incluido como punto noveno del orden del día del próximo Consejo el tratamiento de «algunas cuestiones planteadas a la anterior presidencia del Consejo Fiscal por los señores vocales». Un ítem que, según ha podido saber El Debate, incluirá todas las peticiones formalmente registradas en el seno del Ministerio Público por la mayoría de los miembros del órgano colegiado, que ostentan entre Asociación de Fiscales (AF) y la Asociación Profesional Independiente (APIF), a través de sus representantes.
Un mandato «continuista»
Algunas de ellas le salpican de manera directa. No sólo es que en su toma de posesión avanzase que será fiel con la línea fijada por su predecesora para el Ministerio Fiscal - reivindicando así el trabajo de Dolores Delgado al frente de la Fiscalía General del Estado (FGE)- sino que manifestó expresamente que su nueva responsabilidad será una «continuación» de los trabajos realizados por la que también fuera ministra de Justicia socialista.
Unas declaraciones que suscitaron todo tipo de críticas entre los fiscales, tremendamente escépticos con la llegada de García Ortiz, por su posición de brazo ejecutor de las mayores polémicas de la insitución durante el mandato anterior, por su pasado socialista y por las acusaciones de injerencia en la labor de los miembros de la Fiscalía, desde la Secretaría Técnica.