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La vicepresidenta Ribera junto a la portavoz y a la ministra DariasEFE

Está «cómodo»

El Gobierno recoge el guante de Ayuso y Moreno y entra en tromba en la batalla fiscal

El Ejecutivo aprovecha para confrontar su modelo con el de Feijóo; y asegura que sus bajadas de impuestos benefician a la mayoría, mientras que las del PP están pensadas para una minoría

La portavoz del Gobierno ha criticado duramente la decisión de Juanma Moreno de eliminar el impuesto de Patrimonio y deflactar el tramo autonómico del IRPF -siguiendo el modelo madrileño-, a la vez que ha negado que el Ejecutivo esté pensando en recentralizar algunos impuestos, como horas antes había sugerido el ministro de la Seguridad Social.

Isabel Rodríguez se ha dirigido a los andaluces desde la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros: «¿Está usted entre los elegidos? Un 99% no. ¿Cree que este impuesto le beneficia? No». Y ha añadido una tercera pregunta: «¿Cree que esta decisión le afecta? Nos afecta. La Junta de Andalucía va a dejar de recaudar millones de euros (son 120 millones, en concreto), y eso son menos recursos para la comunidad autónoma, para contratar médicos, maestros, para la gratuidad de los libros...», ha enumerado.

El Ejecutivo se siente «cómodo» con el debate abierto sobre los impuestos, reconocen fuentes gubernamentales. En La Moncloa creen que en un contexto de crisis en el que el Estado se tiene que hacer más presente -a través de ayudas, subvenciones…-, el modelo del PP es minoritario y clasista. Y que la opinión pública lo rechaza, puesto que quita a muchos para dárselo a unos pocos.

«Se trata de confrontar dos modelos distintos», ha señalado la portavoz. Ésta ha contrapuesto la rebajar del IVA de la electricidad y el gas al 5 % decretada por el Gobierno para beneficio de la mayoría -aunque el Ejecutivo lo hizo a rastras- a las bajadas de impuestos que lleva a cabo el PP para «una minoría». Lo que, en opinión de Rodríguez, lleva a concluir que efectivamente Alberto Núñez Feijóo defiende los intereses de quienes no son clase media y trabajadora.

La comodidad del Gobierno con este debate se ha visto empañada, no obstante, por las declaraciones de José Luis Escrivá abogando por que el Estado recupere la gestión de algunos impuestos para que no existan disonancias entre comunidades. La llamada armonización fiscal. Rodríguez ha desautorizado al titular de la Seguridad Social. «El propio ministro Escrivá ha dicho que se trataba de una opinión personal», ha remachado.

Aunque ahora al Ejecutivo no le interese ese «155 fiscal» -así lo ha llamado este martes el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida-, hace dos años Pedro Sánchez acordó con ERC acabar con el «dumping fiscal» de la Comunidad de Madrid. Claro que, entonces, el presidente cortejaba a Esquerra para que le apoyara los Presupuestos de 2021.

A quienes sí les sigue interesando que el Gobierno ate en corto a la Comunidad de Madrid, y ahora también a Andalucía, es a Unidas Podemos. «Respetamos las competencias en materia fiscal, pero al mismo tiempo es necesario establecer una suerte de mínimo», ha sostenido Pablo Echenique desde el Congreso.