Cartel indicativo de la cárcel de Pamplona
La hoja de ruta «presos por Presupuestos» de Otegi se cumple al detalle un año después
En el último año, Interior ha trasladado a las cárceles vascas más etarras que en los tres años anteriores
Este jueves se cumple exactamente un año de aquella famosa frase del líder de Bildu, Arnaldo Otegi, cuando dijo ante su militancia: «Tenemos a 200 (presos) dentro. Y esos 200 tienen que salir de la cárcel. Si para eso hay que votar los Presupuestos, pues los votaremos. Así de alto y claro os lo decimos».
El Gobierno de Pedro Sánchez apenas tardó unos minutos en salir en tromba para negar las afirmaciones del líder abertzale. «No rotundo», expresó el presidente del Gobierno. «Aquí la ley se aplica en todo momento», aseguró el ministro del Interior Fernando Grande Marlaska.
Entrada del centro penitenciario de Zaballa, en Álava
Pero lo cierto es que desde que Arnaldo Otegi pronunció aquellas palabras, mucho ha cambiado la situación de los presos de ETA.
El doble en el último año
Según el Observatorio de Política Penitenciaria de la Asociación de Víctimas del Terrorismo, hasta el momento en que Otegi pronunció aquellas palabras el Gobierno de Pedro Sánchez había trasladado a las cárceles vascas en los tres años que llevaba en el poder a 73 presos pertenecientes a la banda terrorista ETA. En estos momentos, un año después, los traslados al País Vasco son 154, 81 más que en octubre de 2021.
Eso no quiere decir que todos estén en la cárcel. Por un lado, están los presos que a lo largo de este año han cumplido condena, alrededor de una veintena. Y por otro lado, están los presos que una vez que han llegado a las cárceles vascas, se les ha concedido el tercer grado, es decir, la semilibertad de no tener que acudir a prisión más que para dormir entre semana.
Porque ese es uno de los pasos de la hoja de ruta marcada por el «presos por presupuestos», que no es del año pasado, sino que viene de más atrás, desde que los de Otegi apoyaron por primera vez los presupuestos de Sánchez en 2019.
Por fases
En los tres primeros años del Gobierno Sánchez se llevó a cabo la primera fase. En Instituciones Penitenciarias se registraron 272 traslados de presos de ETA. La mayoría fue a cárceles cercanas al País Vasco ya que solo 73 entraron en el territorio.
En el último año, el «presos por presupuestos» de Otegi dieron paso a la segunda fase. En estos 12 meses se han producido 84 traslados y, por lo tanto, la práctica totalidad fueron a cárceles del País Vasco.
Esta segunda fase coincidió en el tiempo con el traspaso de las competencias de las políticas penitenciarias al Gobierno de Urkullu, de manera que, al tiempo que los presos entraban en las prisiones de Zaballa, Martutene o Basauri, se acogían a una mayor flexibilidad penitenciaria. Mientras que en los tres primeros años del Gobierno Sánchez se concedieron 23 terceros grados según el Observatorio de Política Penitenciaria de la AVT, en el año que las competencias corresponden al Gobierno Urkullu, se han concedido 29 terceros grados, de los que 3 han sido revocados y otros 13 están pendientes de recursos.
¿Y ahora qué?
Previsiblemente, en los próximos meses finalizará esta segunda fase, estarán todos los presos de ETA en las cárceles vascas o en la de Pamplona, aunque Navarra no tiene transferidas las competencias penitenciarias.
En la actualidad hay 41 presos de ETA fuera del País Vasco, de los que 11 se encuentran en la prisión de Pamplona y, en principio, permanecerán ahí hasta que cumplan condena. Por lo tanto, fuera del País Vasco o Navarra hay 30 presos. Teniendo en cuenta que desde el pasado mes de julio esa segunda fase de traslados de presos a cárceles vascas se ha acelerado y se registran entre 11 y 12 traslados cada tanda, todo apunta a que se va a cumplir la teoría de la AVT: «Para Navidad, todos en casa».
